oviedo. Un hombre de 86 años se suicidó ayer arrojándose al vacío desde la azotea del edificio donde residía, en la localidad asturiana de Piedras Blancas, tras matar a su mujer, I. O. G., de 83, asestándole varias puñaladas en el pecho, según informaron fuentes de la Guardia Civil.
El cadáver del anciano, que responde a las iniciales J. F. A., fue localizado por agentes del instituto armado en la vía pública poco antes de las 08.00 horas e inicialmente se pensó que se había precipitado al vacío desde el inmueble.
Poco después, el cadáver fue identificado por un familiar que se dirigía al domicilio para visitar al matrimonio, que sufría problemas de salud, que en el caso de la mujer, I. O. G., la mantenían postrada en la cama desde hace años al padecer un proceso terminal de Alzheimer.
Los agentes accedieron entonces al interior de la vivienda, donde localizaron el cuerpo de la mujer, que presentaba varias heridas incisocontusas en el pecho. Los cadáveres del matrimonio, que tenía una hija que también reside en el municipio de Castrillón, fueron levantados por agentes de la Guardia Civil.
red de explotación sexual Por otro lado, casi 400 mujeres han sido liberadas en lo que va de año de las redes que se dedican a la explotación sexual, un negocio que sigue moviendo mucho dinero en el Estado -se calcula que cinco millones de euros al día--y que, cada vez más, se sirve de pisos en lugar de los clásicos clubes de alterne.
Para atajar el delito de trata, incorporado en la reforma del Código Penal de 2010, la policía puso en marcha un plan que justo ayer cumplió cuatro meses, y que ya está dando frutos, como pone de manifiesto, en una entrevista con Efe, el inspector jefe José Nieto, responsable de Inteligencia y Análisis de Datos de la Comisaría General de Extranjería y Documentación.
Con este plan, la Policía Nacional ha recibido a través del correo electrónico trata@policia.es y del teléfono 900 10 50 90 casi quinientas comunicaciones sobre esta actividad, lo que ha permitido la apertura de veinte investigaciones, de las cuales tres ya han finalizado con algunos detenidos en prisión.