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Enfermería no quiere ir a Minas

w La solución a la saturación en la Facultad de Medicina tras crear Fisioterapia entra en vía muertaw El rector confirmará en pleno debate la nueva dirección de Enfermería tras el cese de la directora

Enfermería no quiere ir a MinasFoto: David de Haro

Bilbao. El problema de saturación en la Facultad de Medicina de la UPV/EHU por la decisión del Gobierno vasco de elevar el numerus clausus de 265 a 350 y la creación del grado de Fisioterapia el año pasado ha entrado en vía muerta. Este callejón sin salida se produce porque el 96% de la Escuela de Enfermería de Leioa ha decidido oponerse a su traslado al edificio de Ingeniería Técnica de Minas en Barakaldo, que está vacío desde principios de curso. Por el momento, se trata de una decisión informal a la espera de que se haga oficial en la próxima Junta de Escuela. Para ello habrá que esperar un mes a que la nueva dirección del centro sea confirmada por el rector, tras la dimisión de la exdirectora en plena polémica.

Según fuentes internas del centro, María Teresa Feito ha cesado en el cargo porque había agotado su mandato "pero fundamentalmente porque ella propuso a la universidad la idea del traslado a Minas", un proyecto que se ha topado con una abrumadora negativa. La sustituirá Clara Sánchez, cuya elección se produjo tras la celebración de la Junta de Campus hace dos semanas, cónclave en el que se trató la reubicación de Enfermería.

Una profesora explica que "a la gente de la escuela, tanto alumnos como profesores, nos parece oportuno que todas las carreras de la rama médico-sanitaria estemos juntas, como pasa en ingeniería, para respetar el carácter multidisciplinar de la facultad".

Tras conocer el plan del traslado a Barakaldo se ha abierto un gran debate dentro de Enfermería que se ha resuelto mediante diversas votaciones en las que la plantilla y los cerca de 640 estudiantes han dado su opinión. Según fuentes consultadas, el sentir mayoritario del centro es contrario a su reubicación en Barakaldo desde el edificio anexo a Medicina. El 96% ha votado en contra de ir a Minas el curso que viene aún a pesar de que desde el inicio de curso están sufriendo "importantes problemas de espacio". "Irnos a Minas solo nosotros nos parece mal", afirma una de las docentes más antiguas de este centro.

Los veteranos de la escuela consideran que de consumarse este traslado "se atacaría todo por lo que hemos luchado siempre: que enfermería esté dentro del ámbito universitario y de las Ciencias de la Salud, ya no por la calidad docente que se pueda dar en Minas, si no a nivel del reconocimiento social de la propia carrera". Desde su punto de vista, su aislamiento "equivaldría a decir que Enfermería vuelve a ser una Formación Profesional y nos ha costado 35 años estar donde estamos". Entre el alumnado hay más diversidad de opiniones. Hay quienes prefieren Barakaldo porque está mejor comunicado que el Campus de Leioa en metro y los que opinan que su traslado es una "injusticia". Para Marta, una alumna de tercero, "si el problema de espacio lo han generado los de Fisioterapia lo justo es que se vayan ellos, que para eso han llegado los últimos". Y más cuando desde principio de curso se han visto obligados de "ir de un lado a otro como saltimbanquis", dice otro estudiante de primero. Los nuevos alumnos fueron trasladados a principios de curso al búnker (Aulario de Enfermería)en la trasera de Medicina.

Pero el problema de espacio en la Facultad de Medicina no es nuevo. Sus alumnos han denunciado en numerosas ocasiones la masificación de unas aulas donde conviven más de 1.500 estudiantes de cuatro grados distintos. La creación de Fisioterapia en 2011 no ha hecho sino agravar el problema que, si bien el curso pasado era manejable al tratarse del primer curso, este año se ha hecho más patente al haber dos. Desde la UPV/EHU apuntan que sus responsables piden a la universidad 2.800 metros cuadrados para el desarrollo del nuevo grado en unas condiciones óptimas y nueve laboratorios de prácticas e investigación, además de salas de estudio o un comedor.

A día de hoy esa petición es inviable, al menos en Leioa. No en vano, la UPV/EHU proyecta trasladar los grados del área médico-sanitaria de Leioa (Medicina, Enfermería, Odontología y Fisioterapia) al futuro Polo Sanitario del Hospital de Basurto en 2017. La única alternativa a corto plazo son los 7.000 metros cuadrados que han quedado libres en la escuela de Minas tras el traslado -junto con la Escuela de Peritos de Bilbao- al Polo Tecnológico de San Mamés a principios de curso.

Minas, para pisos de estudiantes Y mientras los distintos grados de la Facultad de Medicina llegan a algún tipo de acuerdo para resolver el problema, desde el Consejo de Estudiantes de Bizkaia han propuesto que el destino de la antigua escuela de Minas situada en el barrio baracaldés de Beurko sea la creación de viviendas universitarias solidarias. Según Aratz Castro, presidente del Consejo, este proyecto permitiría que el alumnado de fuera de Bizkaia y no tenga medios económicos para ello pueda sufragar sus gastos de vivienda a un coste razonable. En este sentido, señala que "los precios de las viviendas son desorbitados e inasumibles, y además, las becas correspondientes a este capítulo han estado congeladas durante los últimos tres años".

Además de las tasas y el transporte, el Consejo ha decidido incluir entre sus "máximas prioridades" el acceso a una vivienda asequible durante la vida universitaria. En palabras de Castro, "si no se garantiza la vivienda, es imposible garantizar la educación universitaria. La primera es condición sine qua non para la segunda", dice.

"Ante la escasez de residencias universitarias", el Consejo ha propuesto al equipo rectoral destinar Minas a viviendas. La fórmula, explica Castro, "consistiría en que el alumno pudiese tener su hogar a un precio módico por trabajo de voluntariado", a imagen y semejanza del proyecto que promueve la UPV/EHU y el Ayuntamiento de Bilbao, que ofrece pisos de alquiler compartido para universitarios a un precio simbólico de 50 euros en Otxarkoaga y Bilbao La Vieja a cambio de voluntariado comunitario en estos barrios.