iruñea - Familiares de los condenados por el caso Altsasu expresaron su “indignación, enfado, impotencia y rabia” con la sentencia del Tribunal Supremo que “apuntala y confirma la injusticia, el alargamiento del sufrimiento y la absoluta excepcionalidad de este caso”. Sus defensas están estudiando la situación pero se mostraron decididos a acudir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo con el convencimiento de que “le va a decir al Estado español, una vez más, que la Justicia deja mucho que desear”. En este sentido, señalaron que “para ir a Estrasburgo hay que pasar por el Constitucional”. “Hemos asimilado el castigo y ahora tenemos que responder porque la vida sigue, y los chavales tratarán de no perder el tiempo, que bastante tiempo les han hecho perder en esta época clave en su vida”, explicó Antxon Ramírez, en representación de Altsasu Gurasoak.

De la misma manera apuntó que están estudiando “qué posibilidades hay, con los derechos que les corresponden en la cárcel”, de cara a los primeros permisos carcelarios, ante lo cual, remarcó, será “Instituciones Penitenciarias quien deberá a partir de ahora actuar en consecuencia”. La mayoría de los siete condenados que se encuentran cumpliendo su pena en prisión están en disposición de poder solicitar los permisos oportunos para poder tener las primeras salidas de la cárcel, puesto que dichas solicitudes se pueden efectuar una vez que se cumpla el primer cuarto de la condena. El cumplimiento efectivo de las condenas en los casos más graves no podrá exceder de los 7,5 años de prisión, puesto que por la refundición de penas el Código Penal preve que el máximo de la pena a cumplir sea el triple de la mayor de las condenas que se impongan al reo. En este caso, el delito más grave es de 2,5 años y, por tanto, el triple serían esos 7,5 años. En el caso de Adur Ramírez de Alda, Jokin Unamuno (ambos condenados a 8,5 años) y Oihan Arnanz (9,5 años), los tres llevan en la cárcel 1.047 días. El próximo 12 de noviembre cumplirán tres años presos.

Antxon Ramírez e Izaskun Etxeberria, en representación de Altsasu Gurasoak y Altsasukoak Aske, leyeron un escrito en euskera y castellano en el que afirmaron que, si con esta sentencia “han intentado maquillar la injusticia, no lo han conseguido, es una barbaridad y un despropósito”. Aseguraron que el juicio en la Audiencia Nacional ha estado “lleno de irregularidades, falto de garantías” y “marcado por la omnipresencia de la Guardia Civil”. Criticaron que la decisión del Tribunal Supremo es “una sentencia sin terrorismo y sin discriminación ideológica pero con unas penas de cárcel absolutamente desorbitadas”. “No se ha hecho justicia”, dijeron.