Teherán - Las repercusiones por el asesinato del comandante de la Guardia Revolucionaria, Qasem Soleimaní, tendrán su eco en la región ahora y en los próximos años. Así lo expresó ayer el presidente iraní, Hasan Rohaní. "Los estadounidenses no se dieron cuenta del gran error que cometieron; los efectos de este error los verán no solo hoy sino a lo largo de los próximos años", subrayó Rohaní durante su visita a la familia del general Soleimaní. A su vez, el presidente de EE.UU., Donald Trump, aseguró ayer que tiene identificados 52 objetivos iraníes para responder "muy rápido" y "muy fuerte" a las eventuales represalias de Teherán.

El comandante de la Fuerza Quds, encargada de las misiones de la Guardia Revolucionaria iraní en la región, fue asesinado el viernes, junto a varios dirigentes de la milicia chií iraquí Multitud Popular, en un bombardeo selectivo perpetrado por Estados Unidos en Bagdad. Tras el ataque, las autoridades iraníes, entre ellas su líder supremo, Alí Jameneí, clamaron venganza, como también prometió el presidente de Irán a la familia del influyente general asesinado. No se espera, sin embargo, una respuesta inminente y el blanco pueden ser aliados regionales de EE.UU. como Arabia Saudí e Israel.

El portavoz de las Fuerzas Armadas iraníes, Abolfazl Shekarchí, adelantó que Irán "evitará tomar medidas apresuradas", pero que la venganza será "aplastante".

Según Rohaní, el ataque perpetrado en Bagdad por la Administración Trump "permanecerá en la historia de sus mayores crímenes inolvidables contra la nación de Irán".

"Sin duda, si EE.UU. era odiado antes, hoy es mucho más odiado tanto entre la gente de Irán como la de Irak", agregó aludiendo a que también en el país vecino el general era muy influyente.

La milicia iraquí Multitud Popular también ha amenazado con vengar el asesinato, al igual que otros grupos chiíes regionales afines a Irán y estrechamente vinculados con Soleimaní, como el libanés Hizbulá, lo que eleva los temores a una escalada.

En jaque los intereses de EE.UU. Entre las represalias que teme Estados Unidos se barajan posibles ciberataques y acciones contra sus intereses y los de los países aliados en la región. Expertos analistas en Oriente Medio advierten de la posibilidad de ataques contra intereses estadounidenses en Irak, Irán, Siria y Líbano mediante las milicias aliadas como Hezbolá. También se baraja el riesgo de secuestros de extranjeros en estos países y todo Oriente Medio en general.

Otro actor regional que se está preparando para ataque por parte de Irán es Israel, especialmente en las zonas más turísticas del país.

Ante este escenario, toda anticipación es poca. El ministro de Asuntos Exteriores catarí, Mohamed bin Abderrahman al Zani, viajó apresuradamente ayer a Teherán para reunirse con su homólogo iraní, Mohamad Yavad Zarif. Al Zani describió como "preocupante" la situación regional e instó a encontrar "una solución pacífica para reducir las tensiones". Catar tiene en su territorio la base área de Al Ubeid, en la que hay destacados cerca de 13.000 militares estadounidenses, convirtiéndola en la mayor de la región.

Otra importante base estadounidense, Al Dhafra, se encuentra en Emiratos Árabes Unidos, que mantiene una postura muy beligerante en el golfo y se atreve a salirse de la línea marcada por el hermano mayor, Arabia Saudí. En mayo pasado cuatro buques comerciales fueron blanco de "operaciones de sabotaje" cerca de aguas territoriales emiratíes, cuyos destacados puertos se sitúan en el golfo Pérsico frente a las costas iraníes.

Arabia Saudí, el más importante aliado estadounidense en el Golfo, también acoge a militares estadounidenses, cuyo número aumentó en 200 el pasado septiembre en medio de la última escalada con Irán.

En esa ocasión, dos refinerías de la petrolera estatal Aramco fueron objeto de un ataque que obligó a suspender temporalmente la producción de la mayor compañía del mundo en el sector y del que Washington y Riad acusaron a Teherán, pese a que fue reivindicado por los rebeldes hutíes del Yemen.

TRUMP amenaza Trump, aseguró ayer que tiene identificados 52 objetivos iraníes para responder "muy rápido" y "muy fuerte" a las eventuales represalias de Teherán. "Que esto sirva como una advertencia de que si Irán ataca a cualquier estadounidense o activo estadounidense, tenemos identificados 52 sitios iraníes (que representan a los 52 rehenes estadounidenses tomados por Irán hace muchos años), algunos de ellos de muy alto nivel e importantes para Irán y la cultura iraní, y esos objetivos, e Irán mismo, Serán golpeados muy rápido y muy fuerte", dijo Trump en Twitter.