Teherán - El gobernador del Banco Central de Irán, Abdolnaser Hematí, urgió ayer a Europa a implementar con inmediatez el canal especial de pagos para sortear las sanciones estadounidenses y salvar el acuerdo nuclear de 2015.

Hematí instó a que el llamado Instrumento de Apoyo al Intercambio Comercial (Instex, en sus siglas en inglés) este operativo “antes del fin del ultimátum”, en alusión al plazo de 60 días dado por Irán a Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania, los otros miembros del acuerdo nuclear de 2015, tras la salida del mismo de EE.UU. “El mecanismo especial para los intercambios comerciales entre Irán y Europa se ha establecido tanto en Irán como en Europa, por lo que ahora no se acepta ninguna justificación para no implementar el Instex”, declaró el gobernador en una reunión con el embajador de Austria en Teherán, Stefan Scholz.

Estas declaraciones se producen un día después de que la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, asegurara que las primeras transacciones a través de este instrumento podrían llevarse a cabo en las próximas semanas. Pese a ello, Hematí criticó el retraso de los europeos en poner en marcha este canal de pagos, que se perfila como indispensable para salvar el pacto nuclear ante la retirada de Estados Unidos del mismo y su reimposición de sanciones a Irán.

“Si los europeos están preocupados por la reacción de Estados Unidos a las exportaciones de bienes de los Estados de la UE a Irán, pueden probar su capacidad exportando bienes humanitarios y medicamentos”, señaló en su cuenta oficial de Instagram.

El Instex fue presentado en enero pasado por Francia, el Reino Unido y Alemania y, en marzo, Irán registró la compañía correspondiente necesaria para su funcionamiento.

Ante la lentitud en la aplicación de este mecanismo y el fracaso de otras iniciativas previas, Irán informó el pasado miércoles de que suspende la aplicación de algunos de sus compromisos nucleares, como son la venta de excedentes de uranio enriquecido y de agua pesada. Teherán dio, además, el citado ultimátum de 60 días para que los otros firmantes del pacto garanticen las transacciones financieras con Irán y sus ventas de petróleo ya que, de no ser así, dejará de cumplir también con su obligación de no enriquecer uranio por encima del 3,67 por ciento.

Crisis en el Golfo El acuerdo nuclear limita el programa nuclear de Irán para impedir que desarrolle la bomba atómica a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales, pero desde la salida de EE.UU. se ha visto debilitado. A las tensiones nucleares se suma la escalada militar en el golfo Pérsico llevada a cabo por EE.UU., país al que la UE pidió ayer “máxima contención” en su política hacia Irán. - Efe