Síguenos en redes sociales:

El galdakoztarra que compitió en los Juegos de Londres en 1948

El galdakoztarra que compitió en los Juegos de Londres en 1948DEIA

Galdakao. Galdakao perdió el pasado lunes a uno de sus ilustres deportistas: Pedro Apellaniz Zarraga, conocido por todos como Periko. El de Usansolo nació el 8 de febrero de 1924 en el caserío Iberluze y ha fallecido a los 89 años de edad. Fuentes del Ayuntamiento local le califican como referencia de la historia del atletismo, tanto en Bizkaia como en el Estado y van más allá: "Ha sido una leyenda, el último atleta legendario de Galdakao", matizan.

Una página web local le reconoce como "excelentemente dotado físicamente para el atletismo, dominó por completo el cotarro estatal del lanzamiento de jabalina durante más de una docena de años, a la vez que realizaba interesantes incursiones a otras especialidades", cita con texto de Alfonso Tutor Larrea.

A juicio de este autor, Apellaniz (1924) fue trece veces campeón de España, entre los años 1944 y 1958, olímpico en los recuperados Juegos de Londres en 1948, donde actuó en el estadio de Wembley, y fue eliminado tras lanzar 54.60 metros. Como ya ocurrió tras la Gran Guerra, tras la devastación de la Segunda Guerra Mundial, los Juegos Olímpicos se reanudaron en la edición que participó Periko. La situación, según explican los especialistas, no era la más apropiada, ya que había escasez de comida y la Villa Olímpica se instaló en barracones militares.

El vizcaino fue el primer campeón Vasco-Navarro de la especialidad en 1962, en el estadio Berazubi, escenario de la primera conquista del título hispano, en 1944, cuando era un completo desconocido. Fue en 26 ocasiones internacional y en algunas de ellas capitán del primer equipo de España. A ello hay que sumar que resultó catorce veces campeón de Bizkaia en jabalina, desde 1943 hasta 1962. En una ocasión se proclamó campeón de triple salto (año 1948) y en otra de los 80 vallas, también en 1948.

Fue siete veces récordman estatal, así como de Euskadi y Bizkaia, consiguiendo récords en Madrid y Zalla, entre otros lugares. En cinco ocasiones alcanzó el titulo ibérico y fue medalla de bronce en los Juegos del Mediterráneo, con sede en Barcelona. Entre su largo historial, cuenta con el récord estatal mejorado en el campo de fútbol de Santa Bárbara con 63.05 metros en un festival que formaba parte de los festejos patronales de Santa Cruz de Galdakao.

También futbolista A Periko, asimismo, le gustó jugar al fútbol y lo hizo como defensa del Galdakao, "lo que le origino serias lesiones (entre ellas una en la rodilla) que en nada beneficiaban su marcha deportiva y de las que hoy día dispone de serias reminiscencias", valoraba el fallecido Tutor Larrea, quien consideraba que Apellaniz fue el atleta de la localidad de mayor resonancia internacional: "múltiple campeón de Bizkaia y España, récordman absoluto, medalla de bronce de los Juegos del Mediterráneo, y finalmente, olímpico en los juegos de 1948 disputados en Londres, a su calidad deportiva se puede sumar su elevada calidad humana", valora en la publicación Historia del atletismo en Galdakao, editada por el Instituto Municipal del Deporte.

Desde el ayuntamiento local resumen que Apellaniz Zarraga fue seis veces plusmarquista y 22 veces atleta internacional. "Un currículum difícil de igualar y que marcó toda una época, siendo el mejor legado para las actuales generaciones", valoran.

Quienes le conocieron personalmente hablan de él como gran deportista y mejor persona. "Nunca hizo gala de los éxitos conseguidos y siempre mostró el perfil humilde, agradeciendo en todo caso el apoyo de aquellas personas que le ayudaron a conseguir esos resultados", según el testimonio de gente que compartió con Periko Apellaniz más de una charla junto al periodista Alfonso Tutor Larrea, con quien comenzó en el atletismo y autor de la historia del atletismo vizcaino y el último hijo predilecto elegido en Galdakao.

Amigo de Apellaniz y de Tutor es Cirilo Dávila. El periodista guarda bonitas palabras para la pareja. "Con Periko y Tutor Larrea, periodista y amigo, compartí varios encuentros. Solíamos coincidir en el Circuito de Nochevieja de Galdakao y hablábamos, cómo no, del atletismo de antes y de ahora. Periko era un hombre con carácter, pero al que también le gustaba escuchar. De su época solía decir que si antes hubieran tenido los medios que tienen ahora los atletas, con entrenadores, buenos estadios y mejor material, él habría lanzado la jabalina mucho más lejos. Era de carácter afable, alegre y, como te digo, serio".

Periko Apellaniz "sí puede decirse que fue el último atleta legendario en Bizkaia porque todos los títulos conseguidos los logró con ficha federada, es decir, en competiciones séniors y títulos absolutos a nivel de Estado. No es lo mismo eso que seguir consiguiendo títulos, por ejemplo, en veteranos", confirman desde el Ayuntamiento de Galdakao. El funeral por su persona se ofició el pasado martes en la iglesia San Andrés de Usansolo.

Hay quien va más allá y que asegura que recordar a Pedro Apellaniz, "es hablar del atleta con más clase natural, que jamás existió en el Estado. Ver lanzar al atleta de Usansolo era todo un espectáculo. Cuando sujetaba la jabalina, para empezar lo que tenía que ser, la carrera de impulso, lo que contemplabas, era algo parecido a un caminar cansino, que nada tenía que ver con técnica de ninguna clase hasta llegar al límite del lanzamiento, donde se podía contemplar el golpe de brazo más impresionante que uno se puede imaginar. Al gran Pedro, no le hables de técnica, ni cosas parecidas. A él solo le importaba el golpe de brazo final", valora un seguidor del deportista.

"Recuerdo una vez, cuando el récordman francés y uno de los mejores lanzadores del mundo, Michel Macquet, con el cual coincidí más de una vez por los estadios del norte de Europa, tras verle lanzar en los Juegos del Mediterráneo, me dijo un día: este chico que tenéis en la selección de España, en otro país con un nivel atlético superior y un buen entrenador, podría haber sido uno de los mejores lanzadores mundiales".