VISI Rodríguez Ortiz ha cumplido cien años. Se dice pronto. Esta vecina de Zierbena recibió hace unos días el cariño de su localidad y otras cercanas como Santurtzi donde pasa los inviernos con su hija. “Yo he sido siempre muy guerrera. Pero no de mala fe, ¡eh! Guerrera pero con alegría. Guerrera porque tenía que lidiar con una tropa diferente (en referencia a su hermanos menores)”, decía. Un testimonio que representa a muchas mujeres que, en su día, no tuvieron la oportunidad de estudiar. Cien años después, la historia las coloca, con todos los honores, en su sitio. Zorionak, Visi!