Los hornos de calcinación de la mina Segunda del Coto Minero de Ollargan, en Arrigorriaga, han sido incluidos en la Lista Roja de Hispania Nostra, una asociación sin ánimo de lucro, declarada de utilidad pública, que trabaja desde 1976 en la defensa, promoción y puesta en valor del patrimonio cultural y natural. En la clasificación que realiza la entidad sobre el estado de conservación de elementos patrimoniales, la Lista Roja incluye aquellos que se encuentran en riesgo de desaparición, destrucción o alteración esencial de sus valores, con el objetivo de darlos a conocer y lograr su consolidación o restauración. El objetivo es que pasen a la denominada Lista Verde porque ya han sido recuperados y evitar que acaben en la Lista Negra porque, finalmente, han desaparecido o se han alterado sus valores esenciales de manera irreversible.

La importancia de los hornos de calcinación de la mina Segunda del Coto Minero de Ollargan radica en que forman parte de la historia de la actividad minera en Bizkaia. Tal y como precisa Hispania Nostra en la ficha informativa sobre este bien patrimonial “la explotación a gran escala fue tal, que a finales del siglo XIX el agotamiento de los minerales más preciados era una realidad, obligando a las empresas mineras a calcinar el carbonato de hierro en los hornos de calcinación”. Y sobre los existentes en Ollargan, concretamente en el parque Montefuerte, explica que “cuenta con una estructura troncocónica de ladrillo, que fue la más común y extendida en las minas de hierro de Bizkaia durante gran parte del siglo XX”. Fueron construidos entre 1912 y 1914 en su totalidad con fábrica de ladrillo y disponen de cuatro bocas de descarga de arco rebajado. Las dos estructuras existentes alcanzan una altura de aproximadamente 9 metros “contando con 1,40 m de espesor en la base y 0,65 m en el tragante, aunque originalmente debían de tener alrededor de 9,40 m, ya que a ambas les falta el último nivel”.

En cuanto a su grado de protección legal, esta centenaria infraestructura minera se encuentra catalogada en el Inventario de Bienes del Patrimonio Cultural del Gobierno vasco y en el Patrimonio Industrial en el País Vasco. Por su parte, el Ayuntamiento de Arrigorriaga ha incluido los hornos de calcinación de Ollargan, con grado de protección básica municipal, en el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), un documento aprobado de manera provisional el 30 de marzo de 2023.

Estado de conservación

Hispania Nostra hace hincapié en ese informe en que los hornos de calcinación de la mina Segunda “llevan incontables décadas en desuso y, por consiguiente, en estado de abandono total”. En la actualidad se encuentran integrados en el parque de Montefuerte, “lo que los dota de unas labores mínimas de mantenimiento que impiden que estas estructuras mineras hayan sido completamente invadidas por la vegetación”, pero, a pesar de ello, . “han perdido los elementos metálicos como los conos de hierro, las compuertas, los zunchos perimetrales y las pasarelas suspendidas”. Además, “los muros de los hornos han sido decorados con diversas pintadas y el cartel informativo que explicaba la historia minera del lugar ha desaparecido”. Esta situación, advierte Hispania Nostra, “resulta crítica para estas estructuras mineras, ya que su estado de conservación no hace más que empeorar año tras año, existiendo un grave peligro de desprendimiento en los tragantes”. A juicio de esta organización, tienen “un valor histórico y arquitectónico incalculable, lo que los convierte en un claro ejemplo de patrimonio industrial a conservar”, por lo que “debería ser indudablemente preservado”.

Hornos de calcinación

Importancia. Han formado parte de la minería vizcaína desde finales del siglo XIX hasta finales del XX, convirtiéndose en una estructura de obligada construcción en la gran mayoría de las concesiones mineras de Bizkaia.

En Ollargan. Los aún existentes en el parque Montefuerte pertenecieron a la mina Segunda del Coto Minero Ollargan y fueron levantados entre 1912 y 1914.

En la ‘Lista Roja’. Este elemento patrimonial se encuentra incluido en la Lista Roja de la entidad sin ánimo de lucro Hispania Nostra para dar a conocer su estado y e incidir en su restauración.