LA Liga Endesa llega absolutamente rota a su 26ª jornada, partida en dos mitades. Por arriba, los diez equipos que pugnarán por los ocho puestos que dan derecho a figurar en las eliminatorias por el título, con el Joventut ocupando el furgón de cola. Por abajo, los ocho conjuntos envueltos en la siempre árida carrera para evitar las posiciones de descenso a la LEB Oro, con el Surne Bilbao Basket en la pole position. Y en medio, un hueco de cuatro victorias que marca una brecha enorme entre ambas realidades, con la tiranía de los presupuestos marcando la pauta de manera prácticamente matemática en la composición de ambos grupos. Atendiendo a su realidad económica y deportiva, el conjunto vizcaino está en una posición magnífica, siendo cabeza de ratón, mirando desde una situación desahogada esa batalla por ser uno de los mejores 16 equipos de la competición que siempre cita Jaume Ponsarnau como el primer objetivo a certificar. Eso sí, ninguna de esas ocho escuadras que figuran entre la 11ª y la 18ª plaza puede verse todavía ni totalmente salvada ni absolutamente hundida, pues en las nueve jornadas restantes deben disputarse todavía hasta 16 enfrentamientos directos, por lo que el ecosistema puede sufrir variaciones considerables.

Ni el tridente de equipos con diez victorias –Surne Bilbao Basket, Casademont Zaragoza y Bàsquet Girona– está totalmente libre de peligro ni el Zunder Palencia, al que muchos daban por sentenciado hace algo más de un mes, está descolgado de la batalla pese a ser colista con cinco. El Monbus Obradoiro, con seis, marca la frontera del descenso, pero tiene muy cerca a Río Breogán y Coviran Granada, con siete, y al Morabanc Andorra, con ocho. Cada triunfo de margen vale su peso en oro, pero quedan tantos enfrentamientos directos con posibilidad de premio doble –victoria propia y rival que no suma– que la situación es susceptible de sufrir cambios radicales. El derbi gallego de este sábado en Santiago puede ejercer un importante efecto bisagra –un triunfo local igualaría aún más el panorama global, mientras que si se imponen los visitantes el conjunto de Moncho Fernández quedaría muy tocado–, pero ocurra lo que ocurra quedará por delante muchísima tela que cortar.

De hecho, los gallegos, 16º y 17º, son los dos equipos de esta zona de peligro que más duelos tienen pendientes ante rivales directos en estas últimas nueve jornadas con un total de cinco, con los de Veljko Mrsic disputando tres de ellos en casa –frente al conjunto vizcaino la próxima semana, el Palencia siete días después y el Andorra en la penúltima jornada– y el Obradoiro dos –el derbi ante los lucenses y contra los del Principado–. Bilbao Basket, Zaragoza, Andorra y Palencia coinciden en el hecho de tener por delante cuatro enfrentamientos contra equipos de su liga, siendo dos de ellos como anfitrión; al Granada también le quedan cuatro pero solo uno será delante de su público –recibirá al Breogán en la 31ª jornada–; mientras que el Girona solo tiene dos pendientes, aunque en ambos casos ejercerá de anfitrión: contra los de Jaume Ponsarnau en la antepenúltima jornada y ante el Zaragoza en la última.

Dentro de esta pugna global, el Surne Bilbao Basket se ha ganado el derecho de ocupar una posición privilegiada. Con visitas pendientes a Breogán y Girona –jornadas 27 y 31– y con Obradoiro y Palencia, los equipos que actualmente ocupan plaza de descenso, teniendo que pasar todavía por Miribilla –jornadas 30 y 32– tiene en su mano conseguir que la tranquilidad sea su compañera de viaje, siempre y cuando no regale vida a sus perseguidores.

Duelos directos

Jornada 26 Andorra-Zaragoza

Jornada 26 Obradoiro-Breogán

Jornada 27 Breogán-Bilbao Basket

Jornada 28 Zaragoza-Obradoiro

Jornada 28 Breogán-Palencia

Jornada 28 Andorra-Granada

Jornada 30 Palencia-Granada

Jornada 30 Bilbao Basket-Obradoiro

Jornada 31 Granada-Breogán

Jornada 31 Girona-Bilbao Basket

Jornada 32 Bilbao Basket-Palencia

Jornada 32 Obradoiro-Andorra

Jornada 33 Palencia-Obradoiro

Jornada 33 Breogán-Andorra

Jornada 33 Zaragoza-Granada

Jornada 34 Girona-Zaragoza