Cuando aún no era presidente del Athletic, Jon Uriarte dijo que deseaba un equipo cuyo estilo fuera “más rock and roll que jazz” y en su segunda temporada en el sillón de Ibaigane, ya tiene lo que tanto ansiaba. Ernesto Valverde ha dado con la tecla de la verticalidad, la velocidad y la potencia. El técnico ha creado una progresión armónica de cuatro acordes, Nico Williams, Oihan Sancet, Iñaki Williams y Gorka Guruzeta, cuya melodía tararean de memoria y con una sonrisa todos los athleticzales. Porque, aunque Txingurri siempre ensalza el trabajo coral de uno de los equipos de LaLiga menos goleados; no puede obviarse que una de las claves del éxito rojiblanco radica en la letalidad de su cuarteto ofensivo. Los hermanos Williams, Sancet y Guruzeta ya no son una sorpresa. Son uno de los mejores ataques de LaLiga.

Entre ellos acumulan 22 de los 34 goles del Athletic en estas 18 jornadas, lo que ha ayudado sobremanera a convertir a los leones en el cuarto equipo más anotador, con casi dos goles por partido. De hecho, para encontrar en el pasado rojiblanco un registro mejor al actual es necesario retroceder hasta el primer título de Liga de los 80, ese de la campaña 82-83, cuando los dirigidos por Javier Clemente marcaron 37 dianas en los mismos 18 partidos. Pero es que, volviendo a la actualidad, entre los Williams, Sancet y Guruzeta llevan más tantos que 11 clubes de Primera: Betis, Las Palmas, Valencia, Rayo, Osasuna, Mallorca, Alavés, Cádiz, Celta, Granada y Almería. Casi nada. Destacando en esta faceta Guruzeta e Iñaki, ambos con ocho goles cada uno en 18 duelos; mientras que Sancet y Nico acumulan 3 en 16 y 15 encuentros, respectivamente. Con todo, el rock and roll del Athletic no solo hace goles, sino que también los crea –el menor de los Williams lleva cinco asistencias; Sancet, 4; Iñaki, 3; y Guruzeta, 1– y los provoca: Nico ha sido clave en 3 penaltis y Guruzeta, en 1. Aunque la efectividad desde los once metros no sea el punto fuerte esta temporada. Pero esa es ya otra historia.

Oihan Sancet es el mediapunta de confianza de Ernesto Valverde. Pablo Viñas

Así pues, todo parece indicar que el Athletic se despertará mañana plagado regalos de Olentzero porque desde que comenzó la temporada 23-24, el conjunto rojiblanco ha sido muy bueno. Casi excelente. Consecuencia de ello son el quinto puesto en el que se encuentran los leones, acechando la Champions League; y los 35 puntos que atesoran. Una cifra jamás alcanzada en las últimas 40 ediciones de Liga cuando solo se han jugado 18 jornadas. Porque el parón navideño llega en un momento inoportuno: cuando el Athletic acumula ocho encuentros sin conocer la derrota –cinco victorias y tres empates– y teniendo que retroceder hasta el 22 de octubre para revivir el último tropiezo de los de Valverde, que se ahogaron en la orilla ante el Barcelona 1-0 en Montjuïc con un inmerecido gol de Marc Guiu en el 80. Pero es lo que tiene Navidad, que siempre cae el 25 de diciembre.

Con todo, el punto de partida de este nuevo Athletic fue el 19 de agosto. El encuentro ante Osasuna en El Sadar en la que fue la segunda jornada de LaLiga. Fue entonces cuando Valverde cambió sus planes, colocó a Iñaki en la banda derecha, mantuvo a Nico en la izquierda, le otorgó a Sancet la mediapunta y convirtió a Guruzeta en su nuevo delantero centro. Ahí nació el rock and roll rojiblanco. De hecho, pegar a la línea de cal al internacional por Ghana –que se perderá todo enero por la disputa de la Copa África– fue un acierto que ha elevado el rendimiento del mayor de los Williams hasta la excelencia, porque tiene espacios para correr e impulsar no solo su producción ofensiva –es el futbolista de LaLiga con más disparos (29)–, sino también la de sus compañeros. Por eso, Iñaki lo ha jugado todo en Liga, está muy cerca de mejorar ya sus registros del año pasado y, además, se le ve muy cómodo en su nuevo rol de primer capitán por las ausencias técnicas u obligadas de Iker Muniain y Óscar de Marcos.

Nico Williams es un tormento para las defensas por la banda izquierda. Pablo Viñas

Pero si alguien está en estado de gracia en este acorde de cuatro notas, ese es Nico. Es la verticalidad del rock y la improvisación del roll. Y el gol ante el Atlético de Madrid, en el que dribló a Witsel y Lino para limpiar las telarañas de la portería de Oblak, fue la muestra de ello. El menor de los Williams es un veterano de 21 años que acumula 101 partidos con la camiseta del Athletic y que, a tenor de su reciente renovación hasta 2027, aspiran a ser muchos más. Es un martillo pilón por su banda izquierda, siendo el futbolista que más regates ha completado en lo que llevamos de LaLiga, con 48. Es el concertista que si la orquesta rojiblanca no carbura, no duda en cantar en solitario.

Sin embargo, ni la explosividad de Iñaki ni el talento de Nico lucirían igual sin la batería de Sancet. El mediapunta es quien maneja el ritmo y adecúa el compás a las necesidades del partido y las exigencias del rival. Es el enlace con la sala de máquinas y, aunque está a la sombra de unos hermanos siderales, su omnipresencia se deja ver en la mayoría de las ocasiones de gol generadas por el equipo. Asimismo, Guruzeta se ha convertido en una de las sorpresas más gratas, rindiendo por encima de las expectativas y consolidándose como una pieza clave. Valverde ha contado con sus servicios en las 18 jornadas ligueras disputadas hasta el momento, por lo que se encuentra muy cerca de la renovación automática hasta 2025, según las cláusulas de su contrato. Así que parece que Txingurri, Uriarte y el Athletic disfrutarán más que un rato de sus cuarto acordes de rock and roll.

Iñaki Williams está rindiendo a un nivel sideral esta temporada. Pablo Viñas

Sus cifras

  • Nico Williams. Acumula 3 goles y cinco asistencias en 15 partidos y es el jugador de LaLiga con más regates completados, con un total de 48.
  • Oihan Sancet. El mediapunta ha jugado 16 partidos de Liga, en los que ha hecho tres goles y ha dado cuatro asistencias.
  • Iñaki Williams. Mostrando su mejor versión en la banda derecha, lo ha jugado todo en Liga, haciendo 8 goles y 3 asistencias y siendo el futbolista con más disparos de la competición, con 29.
  • Gorka Guruzeta. Se ha erigido como el delantero centro de Valverde y le ha devuelto la confianza con goles: 8 en 18 partidos (17 como titular) y una asistencia.