Cinco jornadas de liga, ninguna titularidad, solo 13 minutos en las piernas repartidos en dos fugaces apariciones ante Osasuna y Mallorca a domicilio y jugador de campo menos utilizado por Ernesto Valverde al margen de los inéditos Adu Ares y Peru Nolaskoain, lesionado desde mediados de agosto. Son los pobres registros de Raúl García (Zizur Nagusia, 11 de julio de 1986) en el tramo inicial de su novena temporada como león, la vigésima en Primera División para formar junto con Miquel Soler y el recién retirado Joaquín Sánchez el trío de futbolistas con más campañas en la máxima categoría. Leyenda del campeonato con 591 partidos ligueros a las espaldas, solo superado por los 622 que disputaron antes de colgar las botas el propio Joaquín y el exguardameta rojiblanco Andoni Zubizarreta, el veterano jugador del Athletic mantiene intacta aun así su voracidad como él mismo se encargó de remarcar el pasado 13 de julio en su última comparecencia en Lezama.

La realidad, no obstante, es que su cuota de participación es cada vez menor, hasta el punto de haberse quedado sin minutos, sin lesión mediante, en los compromisos frente a Real Madrid, Betis y Cádiz. Se trata, para más inri, de los tres envites celebrados en San Mamés, donde su mayúsculo impacto en ejercicios pasados choca con un presente diametralmente opuesto para Raúl García, abocado a ver los partidos desde el banquillo. Territorio desconocido durante tantos años de su carrera, el navarro, puro pundonor y extrema competitividad, figura a día de hoy como uno de los últimos recursos ofensivos a ojos de Valverde. Superado en la rotación por un lanzado Gorka Guruzeta y por un revitalizado Asier Villalibre tras su gol y asistencia contra el Cádiz, la salida como cedido de Javi Martón rumbo al Mirandés alivió en parte la ardua competencia por el puesto de ariete, pero ni así ha podido encontrar Raúl García una mínima regularidad en sus apariciones en el primer mes de competición.

Tercero en discordia en la pelea por ejercer como referencia ofensiva del equipo y con solo dos competiciones a afrontar durante el curso, el 22 del Athletic es consciente de que no tendrá fácil engordar unas brillantes estadísticas a título individual entre las que destacan sus 83 goles en 340 partidos como rojiblanco. Una media de 0,24 tantos por encuentro que constata en parte la tremenda influencia que ha tenido en el apartado ofensivo un futbolista que prolongó un año su estancia en Bilbao el pasado 30 de junio. No fue hasta el mismo día que vencía su contrato cuando Raúl García aceptó firmar una controvertida renovación por un año con una estructura salarial que cuenta con un componente de variable por objetivos.

Sobre la bocina estampó su firma el futbolista después de que los tiempos empleados para trasladarle la oferta y la falta de comunicación con el club a lo largo de la temporada no gustaran en absoluto al de Zizur Nagusia. Así lo reflejó en la mencionada rueda de prensa que ofreció en julio, en la que apuntó que no valoró alternativas al Athletic y que “estaba más cerca de dejar el fútbol que de ir a otro equipo”. Dos meses después, el comienzo de temporada no permite sonreír en el plano personal al navarro, quien mantiene eso sí su jerarquía en la caseta. Veterano curtido en mil batallas, Raúl García ejerce un notable y apreciado impacto entre sus compañeros.

CERCA DE LOS GOLEADORES

Quedó patente el sábado en los gestos que tuvo el de Zizur Nagusia con Guruzeta y Villalibre, goleadores ambos en un partido que cerró Iñaki Williams. Cuando el delantero donostiarra fue sustituido inmediatamente después de hacer el 1-0, Raúl García se levantó del asiento que ocupaba en el banquillo para felicitarle efusivamente y brindarle una carantoña con una sonrisa de oreja a oreja. Tras el gol de Villalibre, apenas un par de minutos después, fue el gernikarra quien se acercó hasta la zona de banquillos para fundirse en un abrazo con el navarro. “Te lo mereces”, le escribió después Raúl García a Villalibre a través de las redes sociales acompañando el texto con la imagen de un búfalo y una diana, muestra inequívoca del buen tono con el que el exjugador de Osasuna y Atlético está afrontando un arranque de temporada en el que está asumiendo a la perfección su papel de veterano.

No por jugar menos, no en vano, deja de ser un claro referente dentro del vestuario Raúl García, quien tuvo que esperar el pasado curso hasta la duodécima jornada de liga para disfrutar de su primera titularidad. Estrenó presencia en el once inicial en la visita del Villarreal a San Mamés el 30 de octubre de 2022 y fue clave en la victoria conseguida por la mínima con una asistencia de gol a Iñaki Williams. Con 35 partidos de liga disputados, 6 como titular, cerró el navarro una campaña 2022-23 en la que estuvo disponible en todas las jornadas para marcar dos goles y repartir tres asistencias. Fue el decimosexto jugador de la plantilla en minutos de juego en liga (955) y el duodécimo en Copa (342) para un total de 1.297 minutos de recorrido que le convirtieron en el decimoséptimo miembro del plantel a nivel de participación. En los compases iniciales del ejercicio 2023-24 los números reflejan que Raúl García pierde terreno, si bien la acumulación de partidos en las próximas fechas puede aliviar el hambre de minutos de una leyenda de la liga.

El dato

591

Son los partidos que suma Raúl García en Primera División para asomar a 31 del récord que comparten con 622 encuentros disputados el exguardameta rojiblanco Andoni Zubizarreta y el recién retirado Joaquín Sánchez.