Guadix, la ciudad ‘granaína’ de las más de 2.000 cuevas
La población andaluza, uno de los asentamientos humanos más antiguos del estado, posee una gran riqueza arquitectónica y religiosa
Uno de los asentamientos humanos más antiguos del Estado, Guadix, paso natural entre Levante y Andalucía a través de Granada, cuenta con un hábitat troglodita muy desarrollado, como evidencia el uso como viviendas de antiguas cuevas en barrios como el de Las Ermitas o de Las Cuevas. Además, atraen al visitante el mirador de La Magdalena, su patrimonio monumental y su arquitectura religiosa.
Las famosas cuevas de Guadix se asientan aprovechando la naturaleza blanda de los terrenos arcillosos de las colinas que rodean la ciudad, que forman un arco de este a sur y oeste. Existen más de 2.000 cuevas, cada una de ellas habitada y repartidas en barrios diferentes. Su origen está en el desplazamiento de los moriscos a los arrabales tras la Reconquista llevada a cabo por los Reyes Católicos.
Además de las cuevas, con toscas puertas de madera, recubiertas de cal y con salida de humo al perforar el cerro, hay muchos atractivos para el visitante en Guadix, empezando por la catedral, construida sobre una antigua mezquita entre los siglos XVI y XVIII; de ahí que arroje una mezcla de estilos góticos, barrocos y renacentistas. Tiene planta cuadrada dividida en tres naves, con coro en el centro.
Además, destacan su teatro romano; la alcazaba, edificada sobre un castillo romano; el Palacio de Peñaflor, levantado como fortaleza en los siglos XVII y XVIII; la iglesia de Santiago, del siglo XVI y de portada plateresca; la plaza de las Palomas, que acoge el Ayuntamiento, o el Barrio Latino con casas nobles e hidalgas. Resulta bonito pasear por sus calles estrechas y empredradas que emulan el Albaicín.
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