El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, acudirá los días 26 y 27 de septiembre al pleno de investidura para tratar de hacerse con el sillón de La Moncloa, una cita para la que, a día de hoy, no cuenta con los apoyos necesarios. De resultar esa cita infructuosa, el político gallego podría ver tambalearse también su liderazgo en el partido, tras unas elecciones generales el 23-J en las que, además, los populares quedaron lejos de las expectativas que ellos mismos se habían generado. Por este motivo, desde el PSOE insisten en que Feijóo se ha agarrado a la investidura para dejar que corra el tiempo y evitar así afrontar un debate profundo en su formación.

El expresidente de la Xunta se enfrenta por tanto a un doble objetivo en el mes exacto que queda hasta la investidura. Por un lado, tratar de afianzar su liderazgo en el partido, reforzando la adhesión de los barones más poderosos del mismo. Y, por otro, presentarse como una opción solvente de cara al resto de grupos, toda vez que mañana mismo comienza su ronda de contactos para tratar de arañar los cuatro votos que le separan de su anhelada meta. La aritmética es tozuda y los 172 escaños que suman PP, Vox, UPN y CC no alcanzan los 176 que marcan la mayoría absoluta.

Con el fin de afrontar ese doble reto, Alberto Núñez Feijóo ha convocado a sus barones para la apertura del curso político en un acto que se pretende cargado de simbolismo hoy en Pontevedra. Siete años después, la cita volverá a ser en el castillo de Soutomaior, ya que el PP ha tenido que recuperar el mando en la Diputación de Pontevedra para poder usar su sede para este evento del partido, que el PSOE no permitió durante sus mandatos.

Proyecto serio

La secretaria general del PPdeG, Paula Prado, en la visita que realizó ayer a los trabajos de montaje para ese evento junto al presidente de la Diputación de Pontevedra, Luis López, aseguró que Feijóo mostrará hoy que es un líder que tiene “un proyecto serio y de país” para España, frente al “futuro oscuro” que ofrece el PSOE.

Explicó que esperan reunir en ese lugar “emblemático” unas mil personas para “celebrar la victoria” en las elecciones. Prado destacó que ha sido el líder que ha devuelto al PP “el orgullo de las victorias” y se mostró convencida de que trasladará a España una forma de gobernar “con capacidad de gestión y poniendo los intereses de los ciudadanos por encima de cualquier otro”.

Un líder, añadió, que llevará a Galicia y a España “por la senda del futuro prometedor y no un futuro oscuro como nos está ofreciendo el PSOE y toda esa amalgama de partidos con los que quiere intentar gobernar Sánchez”, manifestó Prado. Por eso, se mostró convencida de que el de hoy será un “día para celebrar” con el que PP inicia “una nueva etapa”, tras los años de gobierno del PSOE en la Diputación provincial.

Ayuso no asiste

Junto al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, que ejercerá como anfitrión, estarán los presidentes autonómicos de Andalucía, Juanma Moreno; Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco; Extremadura, María Guardiola; o Baleares, Marga Prohens. También asistirá el presidente en funciones de la Región de Murcia, Fernando López Miras, que está a expensas de que un pacto con Vox evite una repetición electoral. A Pontevedra no acudirá, sin embargo, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que se encuentra de viaje, ni el presidente de la Comunitat Valenciana, Carlos Mazón, por un compromiso familiar.