El preso de ETA Álvaro Arri Pascual ha accedido al tercer grado penitenciario y ha abandonado la prisión de Basauri (Bizkaia), donde cumplía una condena de 30 años por asesinatos, estragos y atentados.

El Tribunal Supremo condenó a Arri a 208 años de cárcel por su participación en el atentado cometido el 29 de julio de 1994 en la Plaza de Ramales en el que fallecieron el teniente general Francisco Veguillas, el conductor de su vehículo y un trabajador que descargaba en el lugar.

Arri Pascual ingresó en prisión el 22 de abril de 2003, tras haber estado encarcelado en Francia, y en 2020 fue trasladado de la prisión Castellón II al Centro Penitenciario de Burgos. El pasado mes de abril fue trasladado hasta la prisión de Basauri.

En un comunicado, la asociación de familiares de presos de ETA, Etxerat, ha informado de que Álvaro Arri ha quedado en las últimas horas en libertad condicional tras haber progresado al tercer grado penitenciario.