Urkullu e Iglesias coinciden en que hay que dar a Sánchez estabilidad

BILBAO - La primera reunión entre el lehendakari Iñigo Urkullu y el secretario general de Unidos Podemos, Pablo Iglesias, sirvió más para afianzar los puntos en común entre dos mundos ideológicos muy distintos que en visualizar las diferencias. El encuentro celebrado ayer en Lehendakaritza fue cordial y respondió a los deseos mutuos de conocerse y trasladar sus impresiones en un momento decisivo para el devenir de los Gobiernos vasco y español que tienen, a la vuelta de la esquina, el trámite final para la aprobación de sus respectivos presupuestos del año que viene. Contra todo pronóstico, estas cuestiones no estuvieron sobre la mesa de la reunión de ayer, si bien ambos coincidieron en la necesidad de la “estabilidad presupuestaria”, especialmente en el caso del Ejecutivo de Pedro Sánchez. De ahí que, según afirmó Iglesias, ambos compartan la necesidad de blindar la legislatura de Sánchez.

El líder de Podemos defendió la necesidad de “cuidar la mayoría que hizo posible la moción de censura” que desalojó a Mariano Rajoy de La Moncloa. Iglesias se ha embarcado en las últimas semanas en una operación a varias bandas para atraer a los nacionalistas vascos y catalanes hacia los Presupuestos Generales del Estado. Primero lo hizo el pasado viernes con su reunión en la cárcel de Lledoners con el líder de ERC y exvicepresident de Catalunya Oriol Junqueras. El domingo contactó por teléfono con el expresident catalán en el exilio Carles Puigdemont y ayer lo hizo en persona con el lehendakari.

Durante la reunión de ayer con Urkullu, en la que también participó el portavoz de Elkarrekin Podemos, Lander Martínez, el lehendakari le indicó que la negociación de los Presupuestos Generales del Estado es una cuestión que corresponde negociar al grupo parlamentario del PNV en el Congreso de los Diputados y el Senado. No pasó de página sin antes precisar que valora positivamente la apuesta por la estabilidad presupuestaria, institucional y política.

Fuentes de Lehendakaritza también negaron que hablaran sobre los Presupuestos vascos. En principio el encuentro entre Urkullu e Iglesias abría la puerta a un acercamiento de Elkarrekin Podemos a la propuesta presupuestaria del Gobierno vasco, reproduciendo así un eventual apoyo todavía no trabajado del PNV al pacto de Presupuestos entre PSOE y Podemos en el Estado. Fue Iglesias el que, a preguntas de los periodistas, reconoció que “no son moneda de cambio” los presupuestos españoles y los vascos y que las negociaciones discurrirán por cauces separados.

También compartieron la necesidad de reformar el Estado en base a un modelo “confederal/federal”. Asimismo, coinciden en que el nuevo estatus para Euskadi sea respaldado por el consenso “más amplio posible”. El lehendakari expuso su visión en relación a la necesidad de favorecer una solución política al diseño territorial del Estado. “La reforma del modelo es necesaria y el lehendakari ha compartido la conveniencia de avanzar en fórmulas acordadas que garanticen una respuesta política estructural, partiendo de la asunción de la realidad plurinacional del Estado”, indicaron desde Lehendakaritza.

Iglesias destacó que “Euskadi y sus instituciones son una expresión de la plurinacionalidad del Estado” que les gusta y añadió que hablaron sobre la plurinacionalidad, como “elemento constitutivo de España que habrá que afrontar también”. En cuanto a las políticas sociales, el lehendakari explicó el modelo vasco de protección social construido a lo largo de las últimas décadas. Recordó la necesidad de acompasar las actuaciones futuras en Euskadi con las decisiones adoptadas en el Estado y en Europa. En este sentido, le reiteró su compromiso con la reclamación de una “regulación comunitaria de unas condiciones de trabajo, salario mínimo y estándares sociales básicos, incluida la RGI”.

la naval También abordaron la situación de La Naval, punto en el que Elkarrekin Podemos ha sido muy crítico con el papel del Ejecutivo de Urkullu. Iglesias visitó por la mañana las instalaciones del astillero de Sestao y pidió al Gobierno vasco “que se moje”. Ante esta reclamación Lakua y el PNV han venido replicando que, dada la titularidad estatal del astillero, debe ser el Gobierno español el que se implique y al que deben pedírsele cuentas. No obstante, Urkullu le trasladó la necesidad de trabajar “una solución estructural y con un plan solvente y viable”.