Uno no entiende cómo en el paseo que transcurre por ambas márgenes del río Barbadun, de Muskiz a la playa de La Arena, el tramo correspondiente a la orilla derecha del río Cotorrio cambia radicalmente de pavimento. En un alarde de ser más papistas que el Papa, el departamento de URA prohíbe el mortero autorizado por Costas a lo largo del Barbadun por ambas márgenes -compuesto de arena, cal y fibras ecológicas-, dejando un pavimento sólido, ecológico y duradero. El autorizado por URA, en la margen derecha del pequeño río Cotorrio, zona de su competencia (o incompetencia), consiste en una base de prefabricado plástico, recubierto de tierra y en espera de que prenda el césped sembrado, que cuando crezca no sabemos de quién será la competencia de cortarlo. Además, la prohibición por parte de URA de la urbanización y pavimentación del paseo de la margen izquierda del río no tiene en cuenta que su cauce trascurre canalizado en cemento. Me gustaría que alguien de URA diera una razón convincente del porqué de esta decisión, por muy ecológica que sea.
