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Urge aclarar qué ha pasado en Somoto

Al PSE y al Gobierno de Patxi López les toca dar cuenta de la tarea que ha desempeñado su delegada en Chile y Perú, Ana Urchueguía, en Nicaragua, donde adquirió propiedades de la ONG a la que financió desde el Ayuntamiento

LAS informaciones que comenzó a revelar ayer DEIA, que continúa hoy y que completará a lo largo de varios días, sobre las propiedades de la actual delegada del Gobierno de Patxi López en Chile y Perú y exalcaldesa de Lasarte-Oria, Ana Urchueguía, en la localidad nicaragüense de Somoto arrojan luz sobre un asunto que había generado infinidad de rumores a lo largo de los años e incluso habían dado pie a la creación de una comisión de investigación en la localidad guipuzcoana, que a duras penas está pudiendo hacer su tarea ante los continuos obstáculos que está encontrando en su camino. La demostración de que Urchueguía adquirió en 2007 una finca de un millón de metros cuadrados a la ONG que había estado financiando desde Lasarte-Oria -Asodecom- evidencia hasta qué punto se desconoce la tarea que ha desempeñado este municipio en el capítulo de la cooperación al Tercer Mundo, oculta bajo un manto de oscurantismo, falta de transparencia y ausencia de control. Una tarea que a lo largo de las últimas legislaturas ha ido generando un gran malestar en la vida municipal con denuncias reiteradas de los grupos de la oposición ante su dificultad para acceder a documentos con los que fiscalizar el destino de los dineros públicos. La contratación de un técnico de cooperación en 2008 y sus revelaciones en torno a las anomalías que había detectado fueron el detonante de una oleada de indignación que terminó canalizándose en una comisión de investigación y la posterior -y sorpresiva- salida de Urchueguía de la alcaldía para ser nombrada representante para Chile y Perú del nuevo gobierno vasco, que entonces empezaba a dar sus primeros pasos tras el pacto entre PSE y PP. La relevancia de la figura de Urchueguía dentro del socialismo vasco es indiscutible en la medida en la que ha ocupado un amplio abanico de cargos: concejala, alcaldesa, juntera, senadora y representante del PSE-PSOE en entidades como Euskal Fondoa (que gestiona las ayudas a la cooperación de las entidades locales y del que ha sido vicepresidenta) y en la Federación Española de Municipios y Provincias, donde ha sido responsable de Cooperación. La evidencia de que su tarea en Somoto ha ido mucho más allá de la cooperación, obliga al PSE y al propio Patxi López, en primer lugar, a aclarar cuál ha sido realmente su papel en Nicaragua. La propia Urchueguía deberá aclarar sus actividades, al margen de las consabidas amenazas de denuncia contra quien las ha publicado. También la justicia está interpelada a actuar tras las revelaciones del Grupo Noticias. Está en juego no sólo la transparencia y la ética en la gestión de lo público, sino la credibilidad de la labor que desempeña la cooperación vasca en el mundo. Para que no paguen justos por pecadores.