VINO como orador invitado de NextGen America y MoveOn Political Action, dos grupos progresistas del Partido Demócrata, y fuimos a oírle. Uno de los senadores más ancianos de la cámara, es el embudo del voto juvenil.

Según John Della Volpe, director de encuestas del Instituto de Política de la Universidad de Harvard, la brecha generacional en la política estadounidense es brutal, y los votantes jóvenes favorecen en gran medida a los demócratas. Se debe en parte al “efecto Bernie”: “Me atrevo a decir que el futuro de este país depende del resultado de estas elecciones” –aseguró– y Nevada está “justo en el centro” de la tormenta política. Si los jóvenes se movilizan, “ganaremos todos”.

El veterano senador de Vermont centró gran parte de su discurso en el terrible aumento del precio de la vida. Aunque existen muchos índices para medir la tasa de inflación, el índice de precios al consumidor urbano (CPI-U), es uno de los más populares; mide la tasa en función del aumento de precio durante un año de una hipotética cesta de la compra. Esta es una de las métricas utilizadas por la Reserva Federal para medir la salud de la economía: Y hoy está enferma.

La tasa de inflación en los Estados Unidos se ha situado de media en el 3,28% entre 1914 y 2022, alcanzando un máximo histórico de 23,70% en 1920 y un mínimo del -15,80% en 1921. Desde 2012, la Reserva Federal se ha fijado como objetivo una inflación del 2% y tiene competencias para tomar medidas si se dispara. A principios de la década de 1980, durante la recesión, la tasa de inflación alcanzó el 14,93%, lo que provocó que la Reserva Federal tomara medidas drásticas. Según la Oficina de Estadísticas Laborales, la tasa de inflación anual ha decrecido durante tres meses consecutivos hasta el 8,2% en septiembre de 2022, la más baja en siete meses, en comparación con el 8,3% de agosto, pero por encima de las previsiones del mercado de 8,1% y muy por encima del 5,39% del año pasado.

El índice de los valores energéticos ha descendido a un 19,8%, por debajo del 23,8% de agosto; también han bajado la gasolina (del 25,6% al 18,2%), el petróleo (del 68,8% al 58,1%) y la electricidad (del 15,8% –el más alto desde 1981– al 15,5%). También se ha observado una pequeña bajada del precio de los alimentos (del 11,4% –el más alto desde 1979– al 11,2%) y el de vehículos de segunda mano (del 7,8% al 7,2%). Pero los precios de la vivienda han aumentado del 6,2% al 6,6%. Además, la tasa subyacente (que excluye alimentos y energía volátiles) subió al 6,6%, el índice más alto desde agosto de 1982, una señal de que la inflación sigue siendo un problema grave.

LOS PRECIOS, UN PROBLEMA GLOBAL

Sanders refutó que las políticas sociales de Biden sean la causa del aumento de los precios. “Es un problema global” –señaló–, “tal como evidencian las altas tasas de inflación en Europa y otras partes del mundo”. La zona euro se enfrenta a las tasas más altas desde la década de 1970. Incluso más altas que en los Estados Unidos: La tasa de inflación anual de la zona euro era del 9,9% en septiembre de 2022. Un año antes la tasa era del 3,4%. La inflación anual de la Unión Europea fue del 10,9% en septiembre de 2022, frente al 10,1% de agosto. Un año antes, la tasa era del 3,6%.

Según Sanders, la alta tasa de inflación en la república se debe a muchos factores, tales como el aumento de la demanda y estrecheces en la cadena de suministros debido a la pandemia, la guerra en Ucrania y la presencia de un mercado laboral fuerte.

Al comienzo de la pandemia, los consumidores comenzaron a gastar menos pero cuando las restricciones por Covid desaparecieron, la gente comenzó a gastar sus ahorros. Sin embargo, las empresas no pudieron responder de inmediato al aumento de la demanda: muchas de ellas habían reducido la producción debido a la pandemia y experimentaron retrasos en los envíos, así como escasez de mano de obra. El resultado de todo ello ha sido un aumento de los precios para la mayoría de los bienes y servicios a nivel mundial.

Pero los mayores aumentos de precios se produjeron en la gasolina, la vivienda y los alimentos: el aumento interanual en los precios de los alimentos fue del 10,4%, mientras que para la vivienda fue del 5,6% y para la energía 41,6%. Estas tres categorías representan casi el 54% del Índice de Precios al Consumidor. Y es el precio de la energía el que ha aumentado más significativamente: el gas ha aumentado un 60% año tras año. Si bien los precios de la gasolina han disminuido en el último mes, siguen siendo altos: la Asociación Estadounidense de Automóviles informa que el promedio federal es de un dólar por litro ($3.76 el galón), casi un 25% más que en 2021.

LAS POLÍTICAS CORPORATIVAS

Sanders señaló que una de las principales fuentes de inflación son las políticas corporativas y recordó que ésta no afecta a todos por igual. Un trabajador promedio gana menos que hace 50 años. “En los años 70 un salario podía sostener a toda una familia; hoy no es posible. Familias que trabajan más de 80 horas a la semana sobreviven de cheque en cheque”, dijo Sanders. Deberíamos aumentar el salario mínimo a 15 dólares la hora. El Congreso no ha aumentado el salario mínimo desde 2007, y hoy es un patético 7,25 dólares por hora: incapaz de afrontar la inflación.

En contraste, las ganancias de las compañías petroleras han aumentado exponencialmente tras la invasión de Ucrania. Con ganancias astronómicas de 174.000 millones de dólares este año, Exxon ha aumentado sus ganancias en un 57%, Chevron 84%, Shell 49% y BP 45%. Estas cinco compañías de dólares han ganado hasta 70.000 millones en 90 días, un 200% más de lo que hicieron en el tercer trimestre del año anterior. El aumento de precios perjudica a las familias con bajos ingresos. El Instituto Estadounidense del Petróleo culpa a la administración Biden, pero no explica por qué las compañías petroleras mantienen bajas tasas de producción. No es la administración de Biden la que les prohíbe perforar más, es la presión de sus accionistas.

Además, estas grandes compañías petroleras en los Estados Unidos pagan una tasa significativamente más baja de impuestos que la mayoría de las otras corporaciones. La Ley de Empleos y Reducción de Impuestos de 2017 redujo la tasa impositiva efectiva para las empresas del 35% al 21%. Y estas compañías reciben subsidios destinados a “ayudar” a la industria porque el petróleo es un “bien vital”. Estas empresas pagaron el 11,7% de sus ingresos antes de impuestos, un 23,3% menos que la mayoría de las empresas. “No podemos permitir que las grandes compañías petroleras continúen aprovechándose de la guerra en Ucrania y la inflación para obtener enormes ganancias aumentando los precios de la gasolina. Necesitamos un impuesto a las ganancias extraordinarias”, dijo Sanders.

“Esta campaña gira sobre la visión de una nueva América, un gobierno y una economía que funcionen para todos nosotros. Y no solo para los muy ricos y los donantes electorales” finalizó Sanders. Su visita a menos de dos semanas de las elecciones en las que la senadora demócrata Catherine Cortez-Masto se enfrenta al exfiscal general Adam Laxalt puede ser determinante. Más de 200.000 ciudadanos de Nevada ya hemos votado, y ahora esperamos ver una sociedad en la que la salud, la justicia social y la educación sean considerados “bienes vitales”. Pronto sabremos si el futuro es ahora o es inalcanzable.