DONOSTIA - El lehendakari, Iñigo Urkullu, destacó ayer que Euskadi lleva “seis años ininterrumpidos de crecimiento” y que en este periodo se ha avanzado en los terrenos de la innovación, el empleo estable y la proyección exterior. Todo ello ha sido posible gracias, en su opinión, a la colaboración público privada que aboga por mantener porque “es un gran activo de nuestro país”.

Por ello y pese a la “incertidumbre”, Urkullu trasladó a los empresarios la necesidad de seguir tomando “decisiones juntos”. En definitiva, continuar avanzando, realizando inversiones, para reforzar su actividad sin dejarse atenazar por la guerra comercial entre EE.UU. y China, el Brexit o la desaceleración económica, cuestiones que siembran dudas a corto plazo.

El lehendakari clausuró el Día de la Empresa organizado en Donostia por Adegi, en una intervención en la que anunció la “determinación” de su Gobierno de “mantener el modelo de estrategia compartida y colaboración” entre las instituciones y el sector empresarial privado, a la vista de sus “buenos resultados”. En este sentido, recordó que la CAV ha sido capaz de superar la crisis económica que, según dijo, “nos ha ido haciendo más fuertes” gracias a la “capacidad de anticipación”.

Tras afirmar que ya se han superado los 25.000 millones de exportaciones vascas, “la cifra más elevada de nuestra historia”, y que tres de cada cuatro contratos que se firman tiene carácter indefinido, Urkullu se dirigió a los empresarios para “reconocer el camino recorrido”.

No obstante, advirtió de que “aún queda por recorrer” y citó los tres retos que, según consideró, debe afrontar la clase empresarial vasca que definió como las transiciones digital, energética y demográfica. Respecto a la primera, apuntó la necesidad de “ser capaces de evolucionar de la fabricación avanzada a la industria inteligente” con especial atención a las actividades relacionadas con la innovación.

En lo relativo al medio ambiente, el lehendakari señaló que la economía verde es “una oportunidad” que las empresas deben aprovechar. Abogó también por el crecimiento de las empresas a través de “procesos de colaboración o adquisición” con el objetivo de diversificar la actividad y adquirir músculo para afrontar nuevos proyectos “de investigación y desarrollo más globales”. “No podemos dormirnos en los laureles”, indicó Urkullu

“decidir juntos” En esta línea, el lehendakari reconoció que se viven momentos de “incertidumbres”, pero esta “siempre ha formado parte de la actividad empresarial” y tenemos “una gran certeza, que dependemos de nuestras decisiones y nuestro compromiso es seguir decidiendo juntos”. De modo, que pidió a las empresas que sigan trabajando para anticiparse a los acontecimientos y seguir reforzando el tejido productivo vasco.

Durante la jornada, que puso colofón a la asamblea anual de la patronal guipuzcoana, su presidente, Eduardo Junkera, abogó por que Gipuzkoa impulse la creación de empresas “más atractivas, competitivas, humanas y éticas”. En este sentido, recordó que el 80% del empleo que se genera en el territorio surge en firmas privadas y añadió que “para que puedan cumplir la función de motor del bienestar de nuestra sociedad es necesario que ganen ambas realidades, las personas y la empresa”.

Junkera realizó estas declaraciones ante alrededor de 600 propietarios y propietarias de compañías del territorio. En el evento tuvieron ocasión de escuchar una serie de reflexiones sobre la nueva cultura de empresa, la colaboración entre compañías y la promoción de talento, considerados pilares del crecimiento económico por parte de Adegi.

En ese contexto, Adegi reconoció ayer a Kirol Grifols de Arrasate y Fresmak de Zarautz por la consolidación de su negocio en el primer caso y por el éxito en la aplicación de la nueva cultura de empresa que promulga la patronal guipuzcoana en el segundo. Estos galardones forman parte de la apuesta de la patronal guipuzcoana por valorar la aportación que el tejido empresarial realiza al territorio.

El director general y fundador de Kiro Grifols, Borja Lizari, fue el encargado de recoger el premio a la Nueva Empresa y durante su intervención apostó por “emprender e invertir en empresas”, aunque admitió que este trabajo es “difícil”. Este galardón reconoce a firmas que con menos de 10 años han sido capaces de crear riqueza y empleo en Gipuzkoa, características que cumple la firma de Arrasate.

La compañía especializada en la automatización de maquinaria para el sector hospitalario Kiro Robotics se creó en 2010 como una nueva cooperativa procedente del Grupo Mondragon y cuatro años más tarde la farmacéutica catalana Grifols adquirió un 50% de su capital social, para ampliarlo al 90% en 2017 a la vista del éxito de su gestión.

El reconocimiento a la implantación de la nueva cultura de empresa que defiende Adegi correspondió a Fresmak, especializada en mordazas a alta presión con una fuerte inversión en innovación y presencia en más de 50 países del mundo que le sitúa en posiciones de liderazgo en amarre.

La compañía de Zarautz, sin embargo, fue reconocida ayer por su gestión interna y por instaurar nuevos modelos de relación entre las personas de la organización que establecen vías comunicativas entre los diferentes departamentos y categorías profesionales con el fin de horizontalizar la gestión.

Su director general, Ramón Cenarruzabeitia, incidió en la capacidad de los trabajadores al afirmar que “invertir en personas es rentable”, y como ejemplo puso a la empresa que dirige, con 52 años de historia.