Tras recorrer Muskiz o Zalla, el programa de visitas guiadas del Museo de las Encartaciones por frentes bélicos de la comarca recala en Balmaseda para sus dos últimas excursiones. La de hoy se centrará en el casco urbano, descubriendo la importancia de la villa en el desarrollo de la Guerra Civil y algunas infraestructuras que han caído en el olvido. El próximo sábado, 22 de enero, se subirá al monte Kolitza, uno de los escenarios de batallas en el verano de 1937 para intentar revertir la ocupación franquista de la zona.Tanto hoy como la semana que viene, las salidas comenzarán con una introducción en el Museo de las Encartaciones de Sopuerta a cargo del arqueólogo de la Universidad del País Vasco Xabier Herrero y Zunbeltz Matabuena Yarza, de la asociación para la recuperación de la memoria histórica Balmaseda 1937. Se trata de “desenterrar del olvido aquellos escenarios en donde comenzó a dibujarse la sociedad encartada del siglo XX; algunos de estos lugares cuentan todavía con restos del paso de batallones de los diferentes bandos”, indican desde el museo.

Balmaseda se convirtió en un punto “fundamental” en la Guerra Civil, puesto que “allí se acantonaron batallones republicanos y después nacionales”. Numerosos edificios cambiaron su uso para adaptarse al contexto bélico y “las fábricas fueron militarizadas” y utilizadas por ambas facciones. “Se construyeron refugios y se habilitaron hospitales, puestos de mando, lugares de abastecimiento, puestos de vigilancia, almacenes militares...”, algunos de los cuales podrán conocer los asistentes a la salida de hoy: hospital, acantonamiento de batallones, cuarteles generales, fábricas o refugios antiaéreos en los que la población se guarecía de los bombardeos.

Tras la caída de Enkarterri en manos franquistas, “en julio y agosto de 1937, con el frente situado entre los montes Kolitza -Balmaseda- y Alén -Sopuerta y Turtzioz- el ejército vasco inició una serie de contraataques sobre la ermita de San Roque, defendida por el ejército nacional, con el objetivo de recuperar el terreno ocupado a finales de junio”. Aquellos “infructuosos ataques” se cobraron la vida de “centenares de soldados de ambos bandos”. Así lo recordará la visita al Kolitza del próximo sábado, que comenzará en el Museo de las Encartaciones con una charla de Xabier Herrero y Zunbeltz Matabuena Yarza a partir de las 10.00 horas e inscripción previa contactando con el museo.

La asociación Balmaseda 1937 recogió aquellos acontecimientos en un cómic ilustrado por César Llaguno que se presentó a principios de 2020. La obra está siendo ampliada para integrar las vivencias durante el conflicto en toda la comarca con el fin de trasladar el material a los colegios y darlo a conocer a la juventud. Los libros de memoria histórica que publica desde 2017 el Ayuntamiento de Galdames, las memorias del de Zalla antes de la dictadura, Jesús Ariño, recuperadas y contadas por su nieta, Jasone Acasuso, o las vivencias de mujeres del mismo municipio en la posguerra, en todos los casos en colaboración con la empresa Novélame, son algunas de las obras más recientes que ahondan en la guerra y dictadura en Enkarterri.

Aniversario de Boinas

Quienes se apunten a la visita guiada de hoy pueden prolongar su estancia en Balmaseda desplazándose al museo Boinas La Encartada. Este fin de semana la entrada es gratuita para conmemorar los 15 años de su apertura al público. La fábrica textil, que funcionó entre 1892 y 1992, empezó a recibir a los turistas en 2007. Actualmente se está recuperando la maquinaria, algunas de cuyas piezas son originales del siglo XIX.

Charla

Primero el arqueólogo Xabier Herrero y Zunbeltz Matabuena Yarza, de la asociación Balmaseda 1937 ofrecerán una charla en Abellaneda.

Paseo

Hoy se verán algunos restos de Balmaseda durante la Guerra Civil, como refugios antiaéreos o el acantonamiento de batallones.