Son personas vulnerables, mayores, con problemas de movilidad en muchos casos, y llevan años esperando a que comiencen los realojos en su barrio, en El Peñaskal, para acceder a una vivienda digna. Los primeros 85 realojos están previstos para finales de 2025 o comienzos de 2026, pero hay 8 casos especialmente dramáticos que requieren de una actuación institucional urgente.
El Ayuntamiento de Bilbao ha aprobado este jueves reforzar la atención y adelantar los procedimientos administrativos. Conchi es una de ellas. Cada día se mete entre pecho y espalda más de cien escaleras para comprar el pan. Pero es que tiene 88 años y lleva 70 en el barrio y, ahora si puede, quiere ir a Santutxu donde vive un hijo. El equipo de gobierno procurará mantener una "mayor sensibilidad" ante situaciones de "especial relevancia y urgencia".
El concejal de Vivienda, Jon Bilbao, ha explicado que el Ayuntamiento ha atendido ya uno de estos casos excepcionales y tiene "en cartera" esos otros ocho casos, la mayoría de personas mayores. El proyecto previsto en Peñascal prevé el derribo de más de 220 viviendas, dada la existencia de construcciones con "graves problemas de estabilidad, accesibilidad y salubridad" y la edificación de nuevos inmuebles para el realojo de los vecinos.
A esa primera fase le seguiría una segunda con otras 150 nuevas viviendas cuya finalización se iría ya hasta el 2030 o 2032. Y es que, como ha ilstrado el concejal de Obras y Planificación Urbana, Asier Abaunza, la operación de microcirugía urbanística en El Peñascal es "muy complicada y compleja" porque obliga a ir "derribando y construyendo de forma encadenada" dado que los mismos vecinos que verán demolidas sus casas serán realojados en las nuevas viviendas.
