La Diputación de Bizkaia ha relajado los requisitos lingüísticos de sus procesos selectivos de personal de forma provisional, con el objetivo de garantizar la seguridad jurídicas de las OPE hasta que las sentencias que han cuestionados los perfiles exigidos sean firmes. Así lo ha confirmado este jueves el diputado de Administración Públicas y Relaciones Institucionales, Aner Izagirre, quien ha advertido de que, si finalmente las sentencias adquieren firmeza, "habrá que realizar las modificaciones legales necesarias para seguir trabajando a favor de la normalización del euskera".

La apoderada de EH Bildu, Rakel Goñi, ha interpelado a la institución foral en el pleno de control que se celebra en la Casa de Juntas de Gernika sobre su decisión de relajar los requisitos lingüísticos en sus procesos selectivos de este año -tras las sentencias que han anulado la OPE de 2022 por discriminar a los castellanoparlantes-, estableciendo que la mitad de las plazas saldrán a concurso sin perfil de euskera, por lo que tendrán más tiempo para acreditar su conocimiento.

Izagirre ha insistido en que es responsabilidad de la Diputación garantizar la seguridad jurídica de los procesos selectivos de su personal, de forma que se desarrollen "sin incertidumbres", tal y como está ocurriendo entre los candidatos a las OPE anuladas por cuestiones lingüísticas. De ahí que la medida adoptada por la Diputación sea "puntual y provisional, no sine die" hasta que las sentencias sean firmes y afectarán " a unos pocos puestos de trabajo". Por ello, ha rechazado que se trata de una "línea de trabajo definida para el futuro" y también que impida "garantizar los derechos lingüísticos de la ciudadanía en la prestación de servicios". De hecho, ha señalado que, una vez incorporados a sus puestos de trabajo, la Diputación pondrá en marcha sus propios mecanismos para quienes deban acreditar su conocimiento del euskera, "ya sea cursos de formación, licencias... No hay ninguna intención de modificar la política de perfiles lingüísticos en el futuro".

De hecho, ha reiterado que la Diputación "mantiene sus argumentos ante las sentencias" y así lo ha reflejado en los recursos presentados. "Los procesos de selección no cuestionan la posibilidad de que las personas que no saben euskera puedan participar en ellos, en absoluto. Se les permite obtener el perfil lingüístico en el proceso, con una prueba específica para ello", ha explicado. "El objetivo de la Diputación es adjudicar las plazas a las personas candidatas más capacitadas y está claro que quienes conocen dos lenguas oficiales en un territorio con dos lenguas oficiales tienen más mérito y capacidad que quienes solo conocen una".

Prudencia

Sin embarco, el elevado número de procesos selectivos afectados por esas resoluciones judiciales, el diputado foral ha considerado "prudente" adoptar una modificación puntual hasta que las sentencias sean firmes. "La Diputación no puede paralizar los procesos selectivos necesarios para garantizar la calidad de los servicios públicos, estabilizar el empleo público y controlar la temporalidad ", ha advertido, sin que la tasa de interinidad, actualmente del 8%, se incremente.

Además, ha apelado a "no caer en el juego a corto plazo" y ser "ágiles". "No nos quedemos mirando al dedo y no a la luna. Si todo esto no finaliza como nosotros queremos, ya encontraremos nuevas vías para seguir trabajando a favor de la normalización y del euskera", ha planteado, señalando que habrá que hacer "modificaciones legales" que no se podrán definir hasta que las sentencias sean firmes.

Decisión "inaceptable"

Goñi ha calificado de "inaceptable" esta decisión ya que ante unas sentencias "euskarófobas" el camino a seguir debe ser "continuar dando pasos en la normalización del euskera, no retroceder".

Para la apoderada de EH Bildu, la medida "puede ser catastrófica" porque se "abre la puerta a que estos funcionarios y funcionarias que accedan a esas plazas cumplan los 45 y que no tengan que acreditar el perfil lingüístico nunca", con lo que "hasta que no entre otra persona en ese puesto de trabajo no se garantizaría el nivel de euskera". A su entender, las consecuencias serán "irreversibles".