Bilbao -Libros, discos, objetos decorativos, bisutería, juguetes, ropa, zapatos o vajillas. A partir del día 1 de marzo, todas aquellas personas que quieran donar artículos para el rastrillo solidario de Unicef 2014 deberán presentarlos en el céntrico hotel Carlton de Bilbao. Allí se habilitará un salón de almacenaje donde, durante toda la semana, en horario de 10.00 a 16.00, se recogerá el género que se pondrá a la venta los días 7, 8 y 9 de marzo.

Este año, el Comité del País Vasco de Unicef vuelve a hacer un llamamiento a las personas y entidades para que pongan su granito de arena, con el objetivo de recaudar fondos que se destinarán a programas en favor de la supervivencia infantil en países del mundo empobrecidos. "El dinero que se colecte servirá para programas de vacunación, registros de nacimiento, mosquiteras, atender a personas con problemas de desnutrición o sida...", explica a DEIA Lola Gortazar, una de las tres voluntarias de la sede que Unicef tiene en Bilbao y que está muy implicada con una iniciativa ya muy tradicional en Bizkaia.

La colaboración y participación ciudadana es fundamental para que este tipo de proyectos se lleven a cabo con éxito. Desde empresas que recolectan objetos entre sus empleados, hasta tiendas que aportan prendas con taras o pertenecientes a temporadas anteriores son todas ellas símbolo de generosidad.

La recaudación del año pasado rozó los 12.000 euros y este año no se quieren quedar atrás: "Hay gente que nos visita los tres días de rastrillo en busca de nuevos chollos o se acercan el domingo por si hay rebajas de última hora", relata Lola Gortazar, tras más de una década de experiencia en la organización de este tipo de eventos solidarios. El reto es vender. Crear ese movimiento continuo de entrega de cosas y posterior venta: "Hemos llegado a tener piezas valoradas en 500 euros por los expertos".

Trabajo previo intenso El trabajo previo, el que está a la sombra, detrás del telón, conlleva muchas horas de labor soterrada. Aun así, todo tiene su recompensa; desde Unicef Bilbao están seguros de que la inauguración del rastrillo, que tendrá lugar el 7 de marzo a las 18.00 horas en el hotel Carlton, volverá a reunir a muchos vizcainos que se acerquen en busca de las mejores gangas solidarias. Y es que, además de los objetos donados, también se llevarán a cabo varios sorteos con "regalos muy atractivos que seguro llaman la atención de los asistentes a la cita".

Un pequeño detalle puede ser la solución para un gran problema. Es por ello que Unicef quiere extender el mensaje: el 1 de marzo comienza la carrera para que el rastrillo solidario de 2014 consiga saltar las barreras, ir más allá e impulsar el espíritu de la generosidad entre los bilbainos.