BILBAO. Sobre las seis y veinte de la tarde, una mujer informó a la Ertzaintza de que había sido víctima de la sustracción de una mochila, en cuyo interior portaba documentación, llaves y dinero, cuando se encontraba en un bar situado en la zona de la Avenida Sabino Arana. Al parecer, había dejado colgado dicho complemento en el respaldo de una silla donde estaba sentada alrededor de una mesa con unos conocidos. Según los datos aportados, se había percatado de la presencia de dos individuos merodeando junto al grupo antes de desaparecer la mochila.
Una patrulla de la Ertzaintza inició una inspección por los alrededores observando unos minutos después a dos varones en la calle García Salazar, que se correspondían con la descripción física de los posibles implicados señalados por la víctima. Estos, al darse cuenta de la presencia policial, iniciaron la fuga a la carrera pudiendo ser interceptado uno de ellos.
Tras realizar las oportunas comprobaciones y después de ser reconocido por la mujer como el autor del hurto, se procedió a su detención. El arrestado, que no portaba ningún tipo de documentación, cuenta con otro arresto anterior por hechos contra la propiedad.
La Ertzaintza continúa con las indagaciones para tratar de identificar al segundo participante en este delito de hurto.
