Ainara Rodríguez: “La época industrial fue gris pero muy necesaria y hay que valorarla”
El turismo industrial está en auge en todo el mundo y Euskadi no es una excepción, ayer la Náutica de Portugalete acogió el I Foro Internacional vasco de esta materia
Portugalete - La historia de Bizkaia y Euskadi no se entendería de la misma forma sin la industria. El tejido industrial lo cambió todo, al igual que su paulatino desmantelamiento cambió el modelo productivo del país. Algunas de esas instalaciones industriales fueron derruidas, pero las que hoy siguen en pie pueden ser un atractivo turístico. Así se defendió ayer en Portugalete en el I Foro Internacional de Turismo de Euskadi, cuyas conclusiones realizó la coordinadora de Turismo de la Universidad de Deusto, Ainara Rodríguez, quien sostiene que “poner en valor el patrimonio industrial es una forma de homenajear a nuestros antepasados”.
¿Cómo definiría usted el turismo industrial?
-El turismo industrial abarca dos actividades muy diferentes entre sí. Por un lado está el turismo activo, que consiste en visitar empresas que están en funcionamiento y, por el otro, está el visitar instalaciones que han acogido proyectos industriales y que están en desuso. Es de este turismo de patrimonio industrial del que hablamos en este foro y en esta rama del turismo se busca aprovechar nuestro legado relacionado con todo tipo de actividades industriales y darle un uso turístico.
¿Esta vertiente turística no se ha valorado hasta hace poco?
-El problema es que este es un tipo de turismo de nicho, está aún por desarrollar. Eso se debe a varios factores como que, por ejemplo, muchas de las instalaciones sean de titularidad privada y a los privados, económicamente, les sale más rentable derruir ese equipamiento. También hay que decir que para los gobiernos anteriores no ha sido prioritario el turismo de patrimonio industrial, estaba en el plan turístico desde 2012, pero no consideraron que fuese el momento de desarrollarlo. Ahora lo es porque este tipo de turismo está en auge en todo el mundo.
Se puede decir que Euskadi se está subiendo a esa ola.
-Así es. Este tipo de turismo no es algo nuevo, en EE.UU. y Reino Unido lleva practicándose desde los años 60 y 70, tenemos en este foro ejemplos como el del Rühr en Alemania? En el Estado no se le ha prestado la suficiente atención, quizá porque el turismo ya estaba asegurando con el sol y la playa, pero ahora, en plena reflexión sobre el tipo de turismo que se quiere, nos estamos dando cuenta de su potencial. El turismo industrial siempre ha estado ligado al cultural, pero, a diferencia del cultural, este tipo de turismo nos lleva al imaginario lugares grises ligados al trabajo. Esa asociación al trabajo ha hecho que no tuviese una gran demanda.
Esa imagen de lugar gris, relacionada con el trabajo, ¿hizo que en Euskadi se quisiese pasar página, quizá demasiado rápido y, con ello, se desmantelase parte del patrimonio industrial?
-El final de la industrialización en Euskadi fue muy duro y todo aquello estaba muy fresco y reciente. Una gran parte de la población quería pasar página pero eso no es algo exclusivo de Euskadi. En Terrassa pasó algo similar con los vestigios de su industria textil, en Asturias con la minería? Sin embargo, luego se dieron cuenta de la riqueza que tenían y ese proceso también lleva su tiempo.
Estamos en mitad de ese proceso, imagino que el hecho de que se organicen este tipo de foros es un paso importante para impulsar la revalorización del patrimonio industrial.
-Creo que este foro va a marcar un antes y un después en Euskadi en esta materia porque, además de las instituciones, están presentes sectores muy cercanos al patrimonio industrial: cultura, arquitectura, urbanismo, ingeniería, arqueología industrial, turismo? Es bueno crear puntos de encuentro como este foro para escuchar las ideas de todos, ver ejemplos a nivel internacional y aprender de ellos para ver qué se puede extrapolar a Euskadi y, de esta manera, seguir dando pasos para poner en valor nuestro patrimonio industrial.
En 2010 hizo su tesis doctoral sobre el patrimonio industrial. ¿Ha habido avances notables en estos ocho años?
-Ha habido avances importantes y muestra de ello es, por ejemplo, que se han creado cuatro rutas que aparecen en el folleto Industria y Patrimonio. También han nacido empresas que están trabajando el sector del turismo industrial. Está habiendo un cambio y una mejora paulatina en este aspecto.
¿Cómo ve el futuro de este tipo de turismo?
-Está en pleno desarrollo. Es una apuesta muy interesante y una manera de preservar nuestra memoria, nuestras raíces, lo que fuimos y lo que somos. El poner en valor nuestro patrimonio industrial es también una forma de homenajear a nuestros antepasados. Tenemos que sentirnos orgullosos de lo que hicieron, aquella época fue gris, pero muy necesaria para nuestra sociedad. Por todo ello, debemos saber valorarla.
En todo ello tendrá un papel muy importante la recién creada Red Vasca de Patrimonio Industrial.
-Va a ser el punto de encuentro de Gobierno vasco, las Diputaciones y municipios industriales de los tres territorios. Hoy se constituirá, probablemente, la mesa de este órgano y, a partir de ahí arrancarán una serie de actividades de cara a la ciudadanía que se desarrollarán entre los meses de noviembre y diciembre. El dar a conocer, socializar el patrimonio industrial y su valor turístico es lo que más nos importa. Tenemos que acercarlo a la ciudadanía vasca antes de mostrarlo a quienes nos visitan.
Más en Sociedad
-
Las temperaturas veraniegas se instalan en Euskadi: un calor sofocante activa la alerta martes y miércoles
-
Manuel Lezertua presenta este martes en el Parlamento Vasco su renuncia al cargo como Ararteko, tras 10 años de mandato
-
“Es un error pensar que hay que escoger entre universidad o un Grado Superior de FP”
-
Dos neurólogos vascos son galardonados por su labor contra las enfermedades neurodegenerativas