donostia - El preso crítico con ETA Ibon Etxezarreta acudió ayer a dos homenajes en la memoria del exgobernador civil de Gipuzkoa Juan Mari Jauregi, por cuyo asesinato hace ayer catorce años el reo acogido a la vía Nanclares ha sido condenado y ha pedido perdón.

En la mañana de ayer se celebraron tres actos en recuerdo del que también fuera juntero socialista entre 1992 y 1994. El primero, público, tuvo lugar en la propia Cámara guipuzcoana a las 10.30 horas. A él acudieron distintas personalidades políticas así como la viuda de Jauregi, Maixabel Lasa, y Joxepi Jauregi, hermana de Juan Mari. Después, los familiares se desplazaron a Legorreta y al paraje de Burnikurutzeta, donde frente a dos esculturas en memoria de Jauregi -la primera, esculpida por el cuñado del asesinado por ETA, Joxe Lasa- realizaron otros dos sencillos actos personales.

Fue a estos dos últimos homenajes a los que se sumó Etxezarreta, que según expresaron varios testigos, depositó un ramo de flores y se le vio “emocionado”. La familia de Jauregi, por su parte, mostró la “satisfacción” de que, catorce años después del atentado que acabó con la vida del exgobernador civil de Gipuzkoa en el bar Frontón de Tolosa, uno de los autores materiales de aquel asesinato reconociera el daño causado y se sumara al recuerdo de Jauregi.

Etxezarreta, cuyo permiso penitenciario concluía a primera hora de la tarde, continuaba así con la línea fijada en la carta remitida a este diario, hecha pública ayer, y en la que pidió perdón por el “injustificable” atentado y reconoció el “daño injusto causado” a la familia de Jauregi.

Una misiva que la viuda del exgobernador civil de Gipuzkoa, Maixabel Lasa, calificó de “estupenda” tras el acto de las Juntas. La que también fuera directora de la Oficina de Atención a las Víctimas del Terrorismo del Gobierno vasco dijo sentirse “orgullosa de haber participado precisamente en que estas personas hayan realizado esta reflexión”.

“Reconocimiento del trabajo” Minutos después del homenaje que todo el arco político de las Juntas Generales tributó al que fuera procurador socialista, Lasa recordó ante los medios de comunicación cómo se vio con Etxezarreta en un encuentro entre víctima y victimario: “Lo que más me ha impresionado es reconocer el trabajo hecho desde la Dirección de Víctimas del Terrorismo, nuestra postura ante la situación y eso les ayudó a pensar y recapacitar de lo que hicieron en su día, eso les ha servido para hacer la autocrítica que están haciendo en estos momentos”.

En una breve intervención en el propio hall de la Cámara guipuzcoana, Lasa aseguró que es precisamente esa autocrítica “lo que pediría al resto de los presos. Me quedo con eso. Me siento orgullosa de haber participado precisamente en que estas personas hayan realizado esta reflexión”.

El acto, una ofrenda floral ante la placa de Jauregi y un minuto de silencio, contó con la presencia del diputado general, Martin Garitano; la presidenta en funciones de las Juntas, Eider Mendoza; la directora foral de Memoria Histórica y Derechos Humanos, Marina Bidasoro; y representantes de todos los grupos junteros así como ediles socialistas, el secretario general de los socialistas guipuzcoanos, Iñaki Arriola; y Monika Hernando y Enrique Ullibarriarana, de la Dirección de Víctimas y Derechos Humanos del Gobierno vasco. Los dirigentes consultados por los periodistas prefirieron ceder todo el protagonismo del acto a la familia y declinaron realizar declaraciones públicas.

En privado sí comentaron las palabras que Etxezarreta publicó ayer, en las que tras reclamar a Sortu que abandone su “silencio e inmovilismo” para contribuir a una convivencia normalizada, realizó autocrítica de su trayectoria: “Por encima de las crueldades que he realizado durante mi militancia, soy persona y me he dado cuenta del daño causado a unas familias determinadas con esos atentados; escuchar sus testimonios me ha afectado y dolido”.