Soy la socia compromisaria que por petición del 90% de sus socias avaladoras sigue al pie del cañón y subió a exigir explicaciones, aunque acabo de ser amatxu y querría estar solo para mi peque. Primero, todas mis inquietudes las envié como siempre con antelación a la junta directiva. Pero comprendo que a veces no da tiempo a contestar y, por ello, subí a exigir respuestas, como derecho de todo socio. Segundo, es difícil salir a hablar ante tanta gente, no solo la asamblea, sino todos los que escuchan y ves al otro lado de los medios de comunicación. Y sobre todo si al ir hacia el atril oyes murmullos negativos, cuando estás a punto de hablar el secretario te corta y coarta, cuando terminas de hablar te abuchean y silban unos maleducados o escriben comentarios soeces e insultantes sin conocerte anónimos sin coraje. Tercero, un socio compromisario se me acercó para decirme de mala forma que no insultara al speaker. Por mi parte, nunca insulté a nadie y menos aún al animador (no orador) de la grada de animación. Simplemente dejé claro que está puesto (no dije nada de que estuviera pagado) para dirigir a la grada y decirles qué y cuándo cantar, algo que el resto de tribunas hacemos de forma natural cuando el partido lo requiere. Cuarto, siempre que subo al atril comento y pregunto sobre muchos temas en poco tiempo. Hay otros socios que con un mismo tema usan el mismo tiempo. ¿Quién molesta más? ¿Quien se preocupa por más cosas de la institución al completo? Para finalizar, y ayudar a mejorar al animador, la canción original de 1932, y que el resto de clubes ha copiado mal, es: Bat, bi, hiru, lau, Athletic Club Bilbao.