Las autoridades de Ucrania rechazaron ayer su implicación en los ataques registrados en la víspera sobre las inmediaciones de la central de Zaporiyia, la más grande de Europa, y alertó de que la parte rusa vuelve a hacer uso de sus sistemas de propaganda para acusarles de “terrorismo nuclear”.

“La propaganda rusa está difundiendo información sobre supuestos ataques con vehículos aéreos no tripulados organizados por Ucrania contra la central nuclear de Zaporiyia”, explicó el CPD, un organismo dependiente del Gobierno de Ucrania que se encarga de contrarrestar las campañas de desinformación rusas. Asimismo, alertó de que la parte rusa “está manipulando” las preocupaciones del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) para tratar de acusar a Ucrania de “terrorismo nuclear”.

“Rusia ataca la central nuclear de Zaporiyia con drones, pretendiendo que la amenaza a la central y a la seguridad nuclear proviene de Ucrania”, señaló el director del CPD, el teniente Andrei Kovalenko, en línea con lo que ya afirmaron el domingo los responsables de la Inteligencia ucraniana.

“Una y otra vez, los rusos vuelven a intentar provocar para culpar a Ucrania. Aunque es sabido que Rusia es quien llevó a cabo repetidamente ataques tanto simulados como reales contra la central de Zaporiyia”, insistió el jefe de los servicios de Inteligencia del Ministerio de Defensa, Andrei Yusov.

“Los rusos han colocado allí a sus tropas y a sus equipos, lo que constituye una grave violación del Derecho Internacional (...) todo el mundo sabe que son los invasores rusos los responsables del estado catastrófico en las inmediaciones de la central nuclear de Zaporiyia”, afirmó Yusov, informa el portal de noticias NV. Las hostilidades continuaron ayer y la central de Zaporiyia –bajo control ruso– informó de que un “dron kamikaze ucraniano” afirmó derribado en las inmediaciones de las instalaciones.

Por su parte, desde el Kremlin, su portavoz, Dimitri Peskov, subrayó la implicación de Ucrania en estos hechos, que suponen una “provocación muy peligrosa” y una muestra de que el “régimen de Kiev” continúa con sus “actividades terroristas”.

Peskov señaló que incluso los trabajadores del OIEA fueron testigos de estos ataques, que dejaron además tres heridos. “Es una estrategia muy peligrosa que tiene muy malas consecuencias a largo plazo”, apuntó.

Acusación a los aliados de Kiev

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia fue más allá y señaló directamente a los países aliados de Ucrania por el supuesto ataque de las Fuerzas Armadas ucranianas contra la central nuclear de Zaporiyia, ubicada en el sur del país, si bien desde Kiev han negado tener ningún tipo de responsabilidad y señalan a Moscú por lo ocurrido.

“La tarea de la comunidad mundial, así como de las organizaciones internacionales, principalmente la Organización Internacional para la Energía Atómica (OIEA), es privar a Kiev de la capacidad de llevar a cabo ataques terroristas contra instalaciones nucleares”, reza el comunicado ruso, que acusa a Ucrania de haberse embarcado en “el camino del terrorismo nuclear”.

Las autoridades rusas denunciaron que se produjeron varios impactos dentro del recinto de la central. El primero contra con una carga explosiva cerca de una cantina de la planta, mientras que el segundo dron alcanzó el muelle de carga y un tercero impactó contra la cúpula del sexto reactor de la central.