EN 1629 Isaac Beeckman, un amigo de René Descartes, propuso un experimento en el que se pudiese observar el fogonazo de un cañón reflejándose en un espejo ubicado a una milla (1,6 km) del primero. En 1638, Galileo propuso un experimento con linternas observadas a cierta distancia. Esos fueron los primeros intentos de la Humanidad para medir la velocidad de la luz, el ritmo al que parece que va a moverse la transformación del universo de la automoción.

Sobre esa realidad, la de adecuarse al nuevo mundo cuanto antes, se apoyó la VIII jornada del Automóvil organizada por DEIA bajo el lema El futuro del motor en Euskadi. Las dudas y oportunidades de la electrificación, la sostenibilidad sustentada en las bajas emisiones, la movilidad urbana o los largos desplazamientos; la necesidad de que la Administración ejerza de hombro sobre el que apoyarse, la financiación o el desarrollo tecnológico fueron algunos de los temas estrella de la mañana en un encuentro celebrado en el Hotel Domine, con Juan Ángel Martínez, periodista de DEIA, como maestro de ceremonias.

Dio la bienvenida a los asistentes (en su inmensa mayoría, representantes de concesionarios oficiales y de Faconauto, la patronal del gremio...) el director general de Editorial Iparraguirre, Javier Andrés, quien dibujó la cartografía de hoy en día, con un parque móvil in albis, en una incertidumbre constante. No en vano, la edad media de los vehículos que nos rodean es de 14,5 años. Se dirían que son, casi, venerables ancianos.

Los encargados de entrar en el detalle de cada punto de análisis para el diagnóstico fueron Manu Núñez, director de Innovación de Petronor; el concejal de Desarrollo Económico, Comercio, Turismo y Empleo del Ayuntamiento de Bilbao, Xabier Ochandiano; la presidenta de Faconauto, Marta Blázquez; el CEO de Volvo Car, José María Galofré; Carlos Olaso, director de Subaru y SSang Yong, y Carlos de Luis, director de comunicación de Seat y Cupra. Cada uno de ellos ofreció su visión apoyándose en los datos que poseen. No por nada, la propia presidenta de Faconauto, que arrancó la jornada (gracias, Juan Ángel, por el préstamo del verbo...), puso los puntos sobre las íes en su discurso. “Dato mata a relato”, aseguró antes de encender el motor de su discurso.

Testigos de todo cuanto les cuento fueron el director de Desarrollo de DEIA, Ibon Mujka; la directora comercial del periódico, Aitziber Jauregi, y otra gente de la casa como Iñigo Aspiunza, Haizea González, Ana Rementeria, Idoia Gutiérrez y Joana Pérez, todos ellos y ellas diseñadores de las jornadas. A las misma acudiero, entre otros, Marta Prieto, gerente de Carwagen; Luis Uriona, propietario del Grupo Meuri; Manel Palau, director gerente de Leioa Wagen; Guillermo Sáez, director comercial de AudI; el director general de Faconauto, José Ignacio Moya; Raúl Pradales, director comercial de Carwagen; Jorge Muñoz, responsable de comunicación de Volvo Car; Nuria Lekue, Jon Lekue, gerente de Autonervión; Francisco Canibe, director comercial de Peugeot Karealde; Fernando Roca, gerente de Ford Mintegi; Anton Taramona, gerente de Ford Taramona; Javier Uriarte, gerente de Mercedes; Itziar Uriona, del Grupo Meuri; Pedro Díez Menika, gerente de Alzaga Motor; Miguel Ángel López, de Blendio; José Ibáñez e Izaskun Ibáñez, gerente de Galindo, Jon Cortazar; Igor Fuertes e Iñaki Arza, de Lurauto; Alfredo Garitagoitia y Joseba Gurtubay, ambos de Banca Empresa de Caixabank o César Escudero e Ignacio Gil, en nombre de BBVA. Ellos y ellas aprendieron y aportaron en una clase magistral dictada por DEIA.