Cuando Antonio Moral asumió la dirección del Festival de Música y Danza de Granada, hace ya cinco años, se fijó un objetivo: internacionalizar la cita. “Quería darle el lugar que se merece, porque es uno de los mejores festivales de Europa y el mejor del Estado español”, ha aseverado este lunes en el Teatro Arriaga. Aquí, en la plaza más importante de Bilbao, ha tenido lugar la presentación de la 73ª edición del certamen, que ofrecerá 116 funciones –entre conciertos, representaciones de danza y espectáculos de calle– entre el 7 de junio y 14 de julio de este año con La Alhambra y algunos de los palacios y templos de la capital nazarí como escenario. Además, la extensión del festival, FEX, también desplegará una amplia y nutrida oferta musical de carácter gratuito por los ocho distritos de Granada y una docena de municipios de la provincia andaluza. En este sentido, Moral –que enfrenta su última edición al frente de la velada– ha augurado que “la ciudad cobrará todo un sentido de festival”, una ciudad que se verá sepultada por un alud de música, danza y espectáculos circenses para estrenar el verano.

Por otro lado, a tenor de los nombres que se darán cita en la ciudad andaluza, la internacionalización del certamen que proyectó su director hace un lustro ya es un hecho. Entre otros, grandes maestros de la música como Kirill Petrenko, Lorenzo Vittori, Charles Dutoit o Klaus Mäkelä ofrecerán sendos conciertos en el marco de un festival que ha puesto el foco en Viena. La capital austriaca, de acuerdo con la organización del festival, “ha sido (y sigue siendo) desde hace casi tres siglos la capital mundial de la música”, la ciudad donde nacieron y desarrollaron su carrera compositores como Franz Schubert. Paul Lewis interpretará a lo largo de cuatro jornadas las 12 sonatas completas por el músico austriaco. Por primera vez, el Festival de Granada ofrecerá la audición íntegra de estas piezas. 

Lewis, que debuta en la cita, ha sido seleccionado como el artista residente de su 73ª edición. "Para mí, Schubert siempre ha sido uno de los compositores más grandes. Es, realmente, el más humano de todos ellos porque su música es capaz de transmitir con una calidad extraordinaria la esencia del ser humano; la vulnerabilidad, la fragilidad, la desesperación... Pero también la esperanza y la belleza", se admira Lewis en un vídeo proyectado durante la presentación.

Sabor vienés

El festival también rendirá homenaje a la música vienesa con las imponentes arquitecturas sonoras de otra de sus grandes figuras, Anton Bruckner. Asimismo, la Orquesta Filarmónica de Viena, el gran icono de la música austriaca, también estará presente en la cita. Dirigida por "uno de los jóvenes directores más cotizados", Lorenzo Viotti, la mítica orquesta visitará Granada el 23 de junio para ofrecer un concierto en el que se interpretarán, entre otras piezas, El capricho español, de Rimski-Kórsakov.

Rimski-Kórsakov es uno de los músicos más importantes de la Rusia decimonónica. En ese sentido, muchas de las piezas que envolverán el conjunto monumental de La Alhambra fueron compuestas en este siglo. Otras tantas se retrotraen al renacimiento (siglos XV-XVI), al barroco (siglos XVII-XVIII) o al clasicismo (siglo XVIII). Sin embargo, el Festival de Granada también presta especial atención a las composiciones modernas. "Todo festival que se precie tiene que tener un compromiso con la música actual", ha reivindicado Antonio Moral.

Este es el apartado en el que participa José María Sánchez Verdú, autor de numerosas obras escénico-musicales que han sido programadas en la Staatsoper o la Deutsche Oper, en Berlín, o en el Teatro Real de Madrid. Es, además, el compositor residente de esta entrega del certamen. Estrenará hasta cinco obras –cuatro de ellas por encargo del Festival – e interpretará una selección de siete piezas compuestas a lo largo de su prolífica carrera. Entre estas, destaca la banda sonora que creó para la histórica película Nosferatu (1922), de F. W. Murnau.

En esta revisión del vampiro participará el acordeonista vasco Iñaki Alberdi. "La pieza puede estar dirigida a un público no musical al que le gusta lo oscuro", ha señalado en el acto de presentación que ha tenido lugar en el Arriaga. Alberdi también se pondrá a las órdenes del compositor en el estreno escénico de KHÔRA, un ciclo para cuatro saxofones y un acordeón microtonal.

La danza es el otro gran pilar que sostiene una cita en la que, como no podía ser de otra manera, el flamenco tendrá una presencia protagonista. Y es que Granada es, según Moral, la cuna de este género. No obstante, el jazz y el fado también tendrán su lugar en esta sección del certamen, adonde la vasca Lucía Lacarra llevará Lost Letters, la primera producción de su recién creada compañía. Coreografiada por Matthew Golding, la pieza se zambulle en la Primera Guerra Mundial, ya que está basada en una carta real escrita desde el frente por un artillero británico a su mujer.