El proceso para elaborar el plan de revitalización de Busturialdea se prolongará durante siete meses y medio. Ese es, al menos, el plazo que maneja la Diputación, que se hará cargo de elaboración una hoja de ruta en la que participarán una amplia representación de la comarca, desde centros educativos a asociación de comerciantes y otros grupos con amplia representatividad social.
El pasado mes de enero, el lehendakari Iñigo Urkullu y la diputada general de Bizkaia, Elixabete Etxanobe, anunciaron la intención de ambas instituciones de poner en marcha un plan integral para revitalizar esta comarca vizcaina, siguiendo la misma dinámica de trabajo que ya se ha llevado a cabo en Ezkerraldea-Meatzaldea y Enkarterri. Su objetivo no es otro que dar un impulso a su desarrollo económico y social, fuertemente condicionada por la presencia de la única reserva de la biosfera de Euskadi, la de Urdaibai. Considerada así por la Unesco desde 1984, “engloba 22.00 hectáreas y la integra un mosaico de acantilados, montañas, playas, ríos y aguas subterráneas, que ofrecen un espectacular paisaje lleno de vida animal y humana”, reconoce la propia BEAZ, sociedad pública foral adscrita al departamento de Promoción Económica que se hará cargo de elaborar el plan, cuya asistencia técnica se adjudicará antes de verano. “No obstante, esta característica diferenciadora condiciona su estructuración, sus infraestructuras y equipamientos, su actividad económica, las relaciones intra e intercomarcales e incluso su idiosincrasia. Condiciona sus indicadores de desarrollo económico y de bienestar de la ciudadanía, y es por ello por lo que requiere de una reflexión, análisis y actuaciones específicas por parte de las instituciones para cumplir con el objetivo que les es propio de contribuir a la competitividad y bienestar de toda la ciudadanía de Bizkaia y Euskadi”.
La metodología que se aplicará para elaborar ese plan será el mismo que se ha utilizado en el resto de áreas ZAP (Zonas de Actuación Prioritaria) de Euskadi, partiendo de un amplio proceso de participación que tendrá en cuenta a los agentes relevantes de la comarca a nivel institucional, empresarial, social y de conocimiento: ayuntamientos, mancomunidad, entidades locales y comarcales de desarrollo, empresas tractoras y otras relevantes de la comarca, centros educativos y de formación profesional, asociaciones empresariales y de comerciantes, y otros grupos con representatividad social. Participarán en diferentes actividades y grupos de trabajo organizados en función de las áreas temáticas de actuación que se definan. El desarrollo socioeconómico se abordará con un horizonte temporal hasta el año 2030 teniendo en cuenta diferentes ámbitos –empleo, infraestructuras básicas, servicios públicos, regeneración medioambiental...– e incorporará indicadores de seguimiento y evaluación para ir contrastando el grado de cumplimiento de cada una de las iniciativas y sus efectos en la comarca.
La elaboración del plan se ejecutará en varias fases. En una primera, se recopilarán los diferentes estudios y análisis ya existentes, incluyendo también las conclusiones de los talleres participativos y de aportaciones de la ciudadanía que puedan haberse desarrollado, con entrevistas con agentes institucionales y socioeconómicos de la comarca. Esta fase no debería extenderse más allá de ocho semanas, y culminará con un documento de análisis y diagnóstico de situación.
Seis proyectos tractores
La siguiente fase, de 16 semanas de duración, se centrará en la elaboración en sí de la hoja de ruta. Servirá para definir los retos principales a abordar, las líneas estratégicas de actuación y las actuaciones más relevantes de cada una de ellas. Por cada actuación se elaborará una ficha explicativa que recoja quién es el responsable, el horizonte temporal de ejecución, su presupuesto y las fuentes de financiación. Asimismo, se identificarán seis proyecto tractores teniendo en cuenta su viabilidad, efecto de arrastre económico y su potencial de impacto social.
Finalmente, el documento se contrastará con la ciudadanía, abriendo un nuevo proceso de participación. La aprobación final la llevará a cabo el grupo motor de la comarca, que estará compuesto por representantes del Gobierno vasco, la Diputación Foral de Bizkaia, y los alcaldes y alcaldesas de los municipios de la comarca. Estará concluido en seis semanas.
En total, la elaboración se prolongará durante un total de 30 semanas, siete meses y medio. La adjudicación a la empresa que dirija todo el proceso se llevará a cabo antes de verano, por lo que desde el departamento de Promoción Económica confían en que su inicio no debería demorarse más allá de esa fecha.
