2 de octubre de 1949. El programa para la “solemne inauguración de los edificios escolares” recogía misa en la iglesia “con asistencia de las autoridades”, traslado en procesión de las imágenes del Sagrado Corazón, bendición de los locales, entronización de las imágenes, izada de bandera, cantos de los niños, intervención del alcalde en la plaza, bailes “a cargo de la Sección Femenina, vino español”, una corrida de toros por la tarde y fuegos artificiales. Jesús Mari Palacio ha rescatado esta información sobre la apertura del edificio de Turtziozko Eskola para una celebración de su 75 aniversario que será muy diferente. Ha recopilado, además, fotografías antiguas siguiendo el llamamiento que el centro y la kultur etxea han realizado a los vecinos y vecinas con el objetivo de organizar una exposición aún sin fecha.
“Durante las obras, las clases se impartieron en locales parroquiales” apunta el investigador local y antiguo alcalde. “Me hace ilusión recuperar este tipo de detalles” de un lugar “imprescindible” para entender el municipio. Allí trabajó durante cuarenta años y ejerció como directora su mujer, Ketty Elola hasta su jubilación. “Fue su primer y último colegio”, recuerda.
Entró aún en tiempos de la dictadura, una etapa en la que los veteranos recuerdan la “severa” religiosidad imperante. Niños y niñas estaban separados en las cuatro clases que existían y “todas las semanas venía el párroco”. Al terminar la formación académica a los 14 años “marchábamos donde podíamos: a trabar en el monte, la fábrica o emigrando a otros países de Europa, que también lo vivimos en los años sesenta y setenta”.
Entre el alumnado desde hace años se encuentran los niños y niñas residentes en el Valle de Villaverde, el municipio administrativamente perteneciente a Cantabria con el que “llevamos vidas paralelas”, ya que pasan la mayor parte de su tiempo y forjan gran parte de sus vínculos afectivos con Bizkaia.
Actualmente, Turtziozko Eskola cuenta con 45 escolares entre Infantil y Primaria: “Desde los 2 hasta los 11-12 años”, repasa el profesor Roberto Canales, la mayoría de la propia localidad y del Valle de Villaverde. “Los traen en autobús y disponemos de servicio de taxi para barrios como Gordón y Cueto”, apunta.
“Al igual que sucede en otros lugares de Euskadi las matriculaciones bajan” por el descenso de la natalidad. Ahora “los datos reflejan un baby boom de quienes se trasladaron a vivir a la urbanización que hay al lado de las piscinas y la que se construyó frente a la escuela”. El ascenso del alumnado “nos da cierta estabilidad”.
Sin embargo, “por otro lado, el trato es una gozada” debido a la proximidad entre los estudiantes y un equipo docente que valora esa familiaridad, resumida en el lema que han adoptado: “Todos los alumnos y alumnas son de todos y todas”. Se refiere a que “hemos roto el molde de tutor con su tutoría, yo provengo del ámbito matemático científico y otras compañeras tienen un perfil más de letras y damos clase a todos los niños y niñas”.
Entre los nueve profesores y profesoras solo una persona es de Enkarterri, pero la distancia no supone inconveniente. “Hemos creado una manera de trabajar, una identidad que hace que no nos importe venir desde lejos”, se enorgullece. En este sentido, la de Turtzioz forma parte de la red Eskola Txikiak. El alumnado se agrupa “de dos cursos en dos cursos. Si las aulas se van vaciando no podremos soportar esa forma de enseñar, vamos a tener que juntarlos con una horquilla de edad más amplia”.
Entrevistas
Por eso, el 75 aniversario de Turtziozko Eskola les proporciona la oportunidad de reivindicar la enseñanza rural. Junto a la exposición en la kultur etxea rodarán un documental articulado en torno a las preguntas que los escolares formularán a diferentes generaciones. Igualmente enmarcado en el Observatorio de la Convivencia, se proyectará en el cine local. “Tenemos hijos y nietos de antiguos alumnos” que se unirán en torno a un referente de la infancia.
Contacto
Familias y kultur etxea. Turtziozko Eskola ha realizado un llamamiento a recopilar fotografías por medio del propio centro y la kultur etxea, la otra probable sede de una muestra todavía sin fecha concreta.
Infantil y Primaria
45
El centro cuenta actualmente con 45 alumnos y alumnas en los cursos de Infantil y Primaria. “Nuestro lema es todos los alumnos y alumnas son de todos y todas”, explica el profesor Roberto Canales, orgulloso de la “identidad” creada en base a un modelo de enseñanza basado en la cercanía.
