El Hospital de Galdakao se prepara para acometer una profunda remodelación en sus instalaciones. La construcción del nuevo edificio de consultas externas, cuyas obras arrancarán este mismo año y entrará en servicio en 2027, permitirá liberar espacio en el centro para mejorar y ampliar las unidades de hospitalización. Pero antes hay que hacer hueco, derribando el actual salón de actos, un edificio situado en el extremo norte de la parcela y cuyas obras de demolición arrancarán este verano.

El Hospital Universitario de Galdakao-Usansolo se ha quedado pequeño para poder acometer las reformas y ampliaciones que precisa para responder a las necesidades asistenciales presentes y futuras: en sus actuales instalaciones no existen espacios de reserva o sin uso que permitan su expansión. El acuerdo firmado con la UPV para convertirlo en centro docente para los alumnos de 4º, 5º y 6º de Medicina requerirá nuevos espacios, el aparcamiento resulta insuficiente para pacientes, familiares y trabajadores, y se necesita más espacio en las áreas de consultas, hospital de día para tratamientos médicos y áreas de procedimientos diagnóstico-terapéuticos invasivos para dar cobertura a la población que debe atender.

Dado que el edificio principal es una estructura vertical sin posibilidades de crecimiento o ampliaciones importantes, Osakidetza construirá un nuevo bloque en los terrenos del hospital, que acoja las consultas externas del centro de forma autónoma, y también las áreas administrativas y el servicio de hospitalización a domicilio.

Pero la construcción de ese nuevo edificio obliga a derribar, hasta cota cero, el actual salón de actos y su conexión con el edificio principal, ya que invade parte de la huella del futuro bloque. El edificio, de forma semicircular y que se encuentra en uso, se sitúa en el extremo norte de la parcela del hospital, con una ocupación en planta de aproximadamente 495 metros cuadrados, una superficie construida de 675 y una altura máxima de once metros. Cuenta con una estructura de hormigón, fachadas con fábrica de bloque de hormigón y de ladrillo, cubiertas invertidas acabadas en grava, cubierta en papel sándwich, solados de terrazo y revestimientos interiores panelados, cerámicos y entelados.

Los trabajos salieron a licitación la semana pasada y se podrán presentar ofertas hasta el día 30 de este mes. Las obras se adjudicarán, previsiblemente, durante el mes de juni, se prolongarán durante tres meses y tendrán un coste de casi 300.000 euros.

Nuevo salón más amplio

Una vez derribado el salón de actos, y hasta que se construya el nuevo edificio, se utilizarán las diferentes salas de reuniones internas y se reorganizará la actividad en ellas: sesiones, reuniones, cursos, jornadas... El futuro bloque de consultas externas contará con un nuevo salón de actos más amplio, versátil y funcional.

Con una superficie de 58.000 metros cuadrados, distribuida en nueve plantas, el futuro nuevo edificio de consultas externas de Galdakao se dividirá en tres grandes áreas. La primera, destinada al uso asistencial, acogerá las consultas externas, y la radiología y la farmacia ambulatorias; en una segunda zona se ubicarán los espacios de dirección y administración, y las aulas de docencia, y la tercera será el gran parking, de 1.129 plazas en cinco plantas subterráneas, para solventar el déficit actual de aparcamiento.

Al detalle

Maquinaria Acceso desde el vial circundante

El acceso de la maquinaria y equipos se realizará desde el vial interno circundante del hospital, de forma que el tráfico de vehículos afecte lo menos posible al núcleo central. La salida de camiones con residuos de la demolición se llevará a cabo a partir de las 15.30 horas, para evitar el tránsito entre las 8.00 y las 15.30, que es cuando más usuarios acuden al centro hospitalario. El vallado se mantendrá para las obras de construcción del nuevo edificio de consultas externas.

Residuos Separados para su reutilización

La demolición generará 1.763 toneladas de residuos entre hormigón, yesos, madera, vidrio, metales... Todos ellos se separarán en sus fracciones correspondientes y se trasladarán a un gestor autorizado para poder ser reutilizados o tratados adecuadamente.