Los clientes que este sábado se han acercado por la pescadería El Cantábrico de Igorre se han quedado boquiabiertos al contemplar en el escaparate de establecimiento una pieza gastronómica de impacto: un bogavante de 5 kilos. El crustáceo –capturado por un pesquero en aguas de la localidad acturiana de Luarca– mide sobre un metro de largo y es el capricho navideño del responsable de la pescadería de Héctor Pérez. "Si no se vende no me importa, te aseguro que no se va a echar a perder", dice con una sonrisa. Y es que son muchos los que ya se lo han imaginado dando sabor a un arroz caldoso o bien colocado sobre una plancha. "Es un manjar. La cabeza y las patas para el arroz y la cola a la plancha", ha lanzado Pérez.
La pieza se vende por casi 300 euros (299,99 euros), a 60 euros el kilo. "Piezas de este tamaño son muy poco comunes de encontrar y me parecen espectaculares. Hace años tuve otro similar y también me lo traje para Igorre. Nos lo comimos entre unos amigos en el txoko", recuerda el veterano pescatero, mientras intenta posar para la foto con el bogavante gigante apoyado en uno de sus hombros. "Calculo que solo una de las patas puede pesar un kilo", dice, mientras hace la comparativa con la largura de su cara. "Mira que yo tengo cara grande, ¿eh? Pues el bicho, en proporción, tiene la largura parecida a mi cara", bromea el pescatero de Igorre.
BOGAVANTE DE 9 AÑOS
Lo cierto es que no es muy común poder contemplar piezas tan grandes como la que este sábado se han podido ver en la pescadería de Igorre. Normalmente un bogavante suele pesar, según ha explicado Héctor, alrededor de 1,5 o 2 kilos. "Este pesa más que el doble", recuerda.
Por su parte, Álvaro Mateos, veterinario amigo de Héctor Pérez, ha calculado que por las dimensiones del crustáceo este podría tener alrededor de 9 años. "El bogavante hacen dos mudas al año, pero como mucho engorda unos 500 gramos/año. Con ese peso mínimo calculo que tiene entre 8 y 9 años", ha confirmado Mateos. Como curiosidad, en 2018 en EE.UU. se capturó uno de 11 kilos y que podría tener unos 100 años. Le bautizaron como el ‘Moby Dick’ de la especie. "
COMPRADO EN LONJA
El 'bogavantazo' de Igorre ha llegado este sábado a manos de Héctor Pérez, pero fue ayer cuando el pescatero lo apalabró a través del WhatsApp con la persona que lo había comprado en la lonja en Luarca el viernes: "Cuando preguntaron si a alguien estaba interesado en la pieza ni me lo pensé. Fui el primero en contestar y esta mañana he ido a por él sin perder tiempo hasta Mercabilbao en Basauri", ha relatado. De hecho, tal y como aclara el pescatero, a primera hora en el mismo Mercabilbao ya le han salido varios compradores al bogavante gigante, pero Héctor lo ha tenido claro. "Me lo llevo para Igorre".
Y es ahí donde el bogavante ha pasado toda la mañana expuesto, intentando moverse con sus enormes pinzas sujetas con gomas, ajeno a los pensamientos de quien lo contemplaba y para satisfacción de Héctor que ha ido difundiendo las fotos de la pieza entre amigos, conocidos y compañeros de profesión. "¿A que es una preciosidad?", lanzaba la pregunta, mientras contemplaba el crustáceo gigante con admiración.
