La programación cultural de Getxo cede todo el protagonismo a las artes escénicas desde mañana y hasta el día 22 con la exhibición de diez trabajos que incluyen la obra de teatro Nevenka y una que centra su temática en el derrumbe del vertedero de Zaldibar. Se trata del ciclo Getxo Eszena, que cumple más de cuatro décadas alzando el telón.
En este caso, será el de Muxikebarri y sobre él se verán funciones como Nevenka (20.00 horas), a cargo de Histrión Teatro y que relata la historia de Nevenka Fernández, que en 2001 ganó, por primera vez en la historia de España, un juicio por acoso contra un cargo político. Otra de las propuestas será revisitar el clásico shakesperiano Sueño de una noche de verano, el día 12, a las 19.00 horas. Sin Remilgos, la sección joven de la compañía local Utopian, ofrecerá su visión de esta conocida trama que transcurre durante el casamiento de Teseo, duque de Atenas. Al día siguiente, viernes 13, las compañías Axut! y Artedrama presentan Hondamendia (19.30 horas), un montaje en euskera que se desarrolla durante los acontecimientos que tuvieron lugar tras el derrumbamiento del vertedero de Zaldibar en 2020, en el que perdieron la vida dos trabajadores.
El viernes 20 será el turno de Zarra (20.00 horas), un trabajo de danza en los pies de Adriana Bilbao que homenajea a la figura de Telmo Zarraonandia, el mítico jugador del Athletic. El sábado, día 21, llega a Muxikebarri Pandataria (20.00 horas), un espectáculo de danza y teatro protagonizado por la actriz Cayetana Guillén Cuervo y el coreógrafo y bailarín Chevi Muraday. Los responsables de cerrar el ciclo el domingo 22 serán Pirritx, Porrotx eta Marimotots, que celebran sus 35 años de andadura con Urteak bete, abenturak bizi (en dos sesiones: 16.30 y 19.00 horas).
“Getxo Eszena quiere ser el reflejo de una filosofía, un compromiso por la diversidad y la calidad, y una apuesta firme por la cultura. A través del humor, el drama, los títeres, la expresión corporal... vamos a abrir una ventana para que el público pueda acercarse a propuestas frescas, emocionantes y divertidas al tiempo que son reflexivas y profundas”, resume la alcaldesa, Amaia Agirre.
