La Dirección General de Tráfico (DGT) ha confirmado que instalará un radar de tramo en Saltacaballo en verano. Por esta zona ubicada en el municipio de Castro Urdiales pasan los conductores vizcainos que se desplazan a Cantabria y es uno de los puntos más conflictivos de la circulación en la A-8.
Entre Ontón y Castro Urdiales
El jefe provincial de Tráfico de Cantabria, José Miguel Tolosa, ha explicado en una entrevista en Onda Cero que el nuevo radar de tramo de Saltacaballo cubrirá unos 6 kilómetros de distancia. La próxima semana comenzarán los trabajos para marcar los puntos exactos de origen y final del radar de tramo que se ubicarán en el viaducto de Ontón y en la salida de Castro Urdiales.
La intención de la DGT es que el radar de tramo de Saltacaballo esté operativo para verano.
Límite de velocidad
Además Tolosa ha avanzado que una vez instalado el radar de tramo de Saltacaballo el límite de velocidad pasará de los 80 kilómetros por hora a los 100. Aunque la siniestralidad grave en este tramo de la A-8 "sigue siendo muy baja" se están registrando accidentes por alcance ya que los vehículos "no llevan velocidades homogéneas" y los conductores frenan al llegar al radar.
El jefe de Tráfico de Cantabria espera que el problema se solucione con la instalación del radar de tramo.
Radares de tramo señalizados
El radar de tramo en la A-8 en Saltacaballo será uno de los 88 que va a instalar la DGT en las carreteras estatales a lo largo de 2024.
El responsable de la DGT, Pere Navarro, aseguró el martes que todos los nuevos radares de tramo "estarán señalizados y tendrán el correspondiente cartel".
Reconoció que para la DGT el radar de tramo es "más justo" que los convencionales. "En un punto, cualquiera puede pasarse el límite de velocidad". Sin embargo, en un tramo -que suele ir entre 2 y 3 kilómetros- "ya tiene más miga" superar la velocidad.
