"El cáncer de mama es el más frecuente y el que más muertes causa entre las mujeres de Euskadi". Así lo explica la ginecóloga de Policlínica Gipuzkoa, Blanca Fernández, que subraya sin embargo, que la tasa de supervivencia del cáncer de mama a cinco años está por encima del 82 por ciento.

Además, ha destacado que la cifra de mujeres que superan esta enfermedad también ha ascendido "significativamente", lo cual, ha señalado "se debe a una combinación de factores que incluyen avances en la detección temprana, tratamientos más efectivos y una mayor concienciación sobre la importancia de la salud mamaria".

Para afrontar el control de la enfermedad, la ginecóloga de Policlínica Gipuzkoa ha apuntado a "una detección temprana, los avances en el diagnóstico, el desarrollo de terapias más efectivas y la concienciación de mejorar el estilo de vida". "La detección temprana es fundamental para un pronóstico favorable en el cáncer de mama", ha destacado.

Por ello, el protocolo pauta que las mujeres entre cincuenta y setenta años deben hacerse una mamografía cada dos años para detectar lesiones antes de que sean palpables. "Otro método de prevención es la autoexploración, que a partir de los veinte años es recomendable hacérselo cada mes y, si aparece uno de los síntomas más frecuentes como la aparición de un bulto de mama o una secreción patológica por el pezón o una retracción del pezón que antes no había, recomendamos acudir a consulta", ha indicado.

La doctora ha afirmado que "el desarrollo de terapias más avanzadas, a su vez, han logrado abordar de manera más precisa las características moleculares del cáncer, logrando mejores resultados para los pacientes", al tiempo que ha destacado que "la concienciación de llevar una vida saludable, haciendo ejercicio y cuidando la alimentación, como la concienciación publica sobre el cáncer de mama, con las campañas de detección temprana y el apoyo a los pacientes, ha logrado bajar esas cifras de mortalidad".