Las diferente inversiones llevadas a cabo por el Ayuntamiento de Bilbao a lo largo de las últimas décadas han provocado una homogeneización de la ciudad que hasta ahora no estaba reflejada en la categorización de sus calles. La clasificación anterior, datada en 1987, recogía siete categorías que con la nueva propuesta llevada a cabo por el área de Hacienda se simplificarán a cinco. La mayoría de las vías, un 51%, se sitúan en la cuarta categoría. Esta clasificación fiscal abordada ahora por el Consistorio, que tendrá reflejo directo en el Impuesto de Actividades Económicas o en la Tasa de Basuras, entrará en vigor en 2025. Según ha detallado Marta Ajuria, concejala de Hacienda, la nueva organización se basa en la revisión de los valores catastrales que lleva a cabo la Diputación Foral de Bizkaia en base a los precios de mercado.

Si la clasificación anterior decretaba que las calles Lehendakari Aguirre y San Francisco pertenecían a la misma categoría, así como el Parque Casilda Iturrizar y la calle Zumarraga, la nueva organización corrige aquellos desajustes que la transformación urbanística de la ciudad ha motivado. Tanto Olga Barrio, directora de Hacienda, como Begoña Basagoiti, jefa de subárea de valoraciones, han incidido en que la clasificación se ha llevado a cabo con criterios objetivos. De hecho, han admitido que esta cuestión es habitualmente judicializada en numerosas urbes, por lo que la revisión, iniciada en 2017 tras la revisión de los Valores Catastrales capitaneada por la Diputación Foral de Bizkaia, se ha realizado con las máximas garantías jurídicas. 

CINCO TRAMOS DIFERENCIADOS

Lo que no cambia con la nueva clasificación es que las zonas más nobles siguen concentrándose en el centro de la ciudad y, a medida que las calles se alejan, su categoría se reduce. La actualización contempla que Bilbao se divide en 1.147 vías en las que hay 12.045 portales. El primer tramo, con un valor promedio de 2.432 euros por metro cuadrado, corresponde a aquellas zonas de Abando e Indautxu, como la Gran Vía o la Plaza Euskadi, donde hay 729 portales (un 7% del total). En el siguiente tramo, entrarían otros 765 portales (un 8% del total) en los que el precio medio es de 1.671 euros por metro cuadrado: desde la calle Correo del Casco Viejo a Juan de Ajuriaguerra en Abando.

A partir del tercer tramo entran aquellas zonas que se sitúan en la periferia del centro. Son 1.623 los portales (un 15% del total) que en los que el precio medio del metro cuadrado es de 1.208 euros. Ahí se engloban desde el Campo Volantín, hasta la calle Karmelo de Santutxu o la Ribera del Casco Viejo. En la cuarta categoría es donde se entran la gran mayoría de los bilbainos, con 6.217 portales. En este tramo, en el que el precio del metro cuadrado está a 752 euros, hay zonas tan dispares como Olabeaga y Zorrotzaurre en todo su conjunto, Ciudad Jardín, la calle Maurice Ravel en Uribarri o el barrio de Arangoiti. La mayoría de las vías (un 51% del total) se sitúan en la cuarta categoría.

En el último tramo, en el que también se engloba todo el terreno no urbanizable de la ciudad así como las zonas industriales, se incluyen 2.711 portales (el 20% del total). Con un valor promedio de 376 euros por metro cuadrado, en esta franja entran aquellas zonas en las que hay más VPO construidas. Destacan algunos puntos como la calle Zizeruena de Otxarkoaga, Camino Peñascal o la calle Gimnasio de San Francisco. 

TRIBUTOS MUNICIPALES

La importancia de la actualización de esta clasificación radica en que los bilbainos pagarán sus tasas en función del tramo que se haya asignado a la zona en la que está su vivienda. En 2025 se tendrá en cuenta este nuevo callejero fiscal para el cálculo de actividades Económicas (IAE), de la Tasa de Basuras, de la Tasa de Aperturas y de las Tasas de Ocupación de la Vía Pública. No se reflejará, por ejemplo, en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), ya que su cálculo se lleva a través de los valores catastrales que la Diputación Foral de Bizkaia volverá a actualizar este septiembre. La nueva clasificación de Bilbao supondrá una modificación de la ordenanza fiscal de la que se dará cuenta la semana que viene, antes de que se tramite durante el mes de junio.