Las torrijas son uno de los postres más emblemáticos de la Semana Santa. A escasos días de comiencen las fiestas, muchas pastelerías y restaurantes ya los sirven en sus mostradores.

Aunque su trabajo de elaboración no resulta complicado, en los últimos años las torrijas han incrementado su precio de forma considerable. Por ello, muchas familias optan por cocinar sus propias torrijas caseras.

La freidora de aire ofrece la opción de preparar torrijas de forma sencilla y en tan solo 10 minutos. Estos son los ingredientes necesarios:

  • 10 rebanadas de pan
  • 500 ml de leche
  • 50 g de azúcar
  • 1 rama de canela
  • 1 huevo
  • 1-2 trozo de piel de limón
  • Aceite de girasol

Calentar la leche junto con el azúcar, la rama de canela y una o dos tiras de piel de limón en una cazuela. Cuando esté a punto de hervir, retirar la cazuela y dejar que temple antes de empapar el pan.

En una fuente ancha, añadir la leche habiendo retirado la rama de canela y la piel de limón. Empapar las rebanadas de pan en la leche dejando que reposen el tiempo suficiente -aproximadamente una hora- para que absorban todo el líquido y sabor. A continuación, se debe batir el huevo y rebozar las rebanadas de pan una vez estén bien empapadas de leche.

Precalentar la freidora de aire a 200ºC. Mientras tanto, engrasar el papel vegetal con un poco de aceite de girasol y colocar las torrijas encima. Añadir unas gotas de aceite por encima e introducir a la freidora.

Cocinar las torrijas 10 minutos a 200ºC, tiempo durante el cual es recomendable dar la vuelta a las rebanadas para que queden perfectamente doradas por los dos lados.

El pan ideal

Esta receta nació hace siglos para aprovechar el pan duro de los días anteriores, por lo que este es el pan ideal de las torrijas. Bañado en leche y posteriormente fritas, el resultado será tierno y jugoso. Por tanto, utilizar pan duro. El pan de molde, por ejemplo, no es adecuado para esta receta.

Torrrija hecha en freidora de aire Pixabay

Características de las torrijas

  • Elaboración con pan: Las torrijas se preparan tradicionalmente utilizando pan del día anterior, lo que le da a este postre una textura firme por fuera y suave por dentro.
  • Remojo en leche o vino: Antes de cocinarse, las rebanadas de pan se remojan en leche endulzada con azúcar y aromatizada con canela y cáscara de limón o en vino, dependiendo de la receta y la preferencia regional.
  • Fritura: Una vez que las rebanadas de pan están bien empapadas, se rebozan en huevo batido y se fríen en aceite caliente hasta que estén doradas y crujientes por fuera.
  • Aromatizadas con canela y azúcar: Tras la fritura, las torrijas se espolvorean con una mezcla de azúcar y canela, lo que les confiere un sabor dulce y aromático característico.
  • Variedad de presentaciones: Aunque la receta tradicional de las torrijas consiste en rebanadas de pan fritas y espolvoreadas con azúcar y canela, existen muchas variantes que incluyen diferentes ingredientes y preparaciones, como torrijas bañadas en almíbar, rellenas de crema, cubiertas de chocolate, entre otras.
  • Textura jugosa: A pesar de su apariencia crujiente por fuera, las torrijas conservan una textura jugosa y suave por dentro, gracias al remojo en leche o vino antes de la fritura.

En resumen, las torrijas son un postre emblemático de la cocina, valorado por su sabor dulce y especiado, así como por su textura suave y reconfortante. Su preparación sencilla y su versatilidad hacen que sean un dulce muy apreciado en diferentes regiones de España y en ocasiones especiales.