Muchas personas se pasan la vida soñando con que les pueda tocar la lotería y les resuelva o mejore el futuro, y la mayoría no se ven correspondidas por el azar. Sí lo consiguió un escocés, que se embolsó nada menos que 9,45 millones de euros, pero no llegó a enterarse de su suerte, porque horas antes murió en un trágico accidente doméstico.

Andrew Gillon, de 59 años, estaba convencido de que un día le iba a tocar la lotería y podría dar una vida mejor a su familia, a la que al menos quería llevar de vacaciones. Y jugaba siempre a la Lotería del Código Postal en su localidad, Wishaw (North Lanarkshire), a 24 kilómetros al sureste de Glasgow.

Pero el destino no le permitió cumplir su sueño, ya que sufrió una caída por las escaleras en la casa de un amigo que le provocó una fractura de cuello. Tras ocho días en el hospital intentando salvarle la vida, el hombre murió durante una operación.

Con la familia en pleno duelo, encontraron en el buzón un sobre dorado en el que se les informaba de que habían ganado 9,45 millones de euros en la lotería. Lo descubrió su hija, Lisa Thomas, de 32 años, que cree que podría ser un mensaje de despedida de su padre. "Sé que su primer pensamiento sería reservarnos unas vacaciones para todos", declaró Lisa a Daily Record, periódico al que aseguró que cumplirá el deseo de su padre y se irá de vacaciones a Florida con el premio. Su madre y viuda de Gillon intentaba salir de su tristeza. "Estoy segura de que él ha tenido algo que ver con esto".