Pedro Sánchez espera como agua de mayo la presidencia rotatoria de la Unión Europea que le tocará asumir en el segundo semestre de 2023. El presidente del Gobierno español se mueve cómodo en el escenario internacional, y podría suceder que ese cargo le proporcione oxígeno en puertas de las elecciones generales previstas para finales de ese año o principios del siguiente, si es que no las adelanta. En el contexto de los preparativos de esa cumbre, el Gobierno español ha anunciado este miércoles una lista con 25 ciudades del Estado que propone que alberguen las principales reuniones que se organizarán en el contexto de su presidencia, y que en algún caso podrían ser de alto nivel con ministros y jefes de Estado. Entre esas 25 ciudades aparecen dos de la comunidad autónoma vasca (Bilbao y Donostia), y una de Nafarroa (Iruñea). Al menos en el caso de Bilbao y Donostia, este periódico pudo confirmar que tomó por sorpresa a ambos ayuntamientos, que tuvieron noticia de la propuesta unos instantes antes del anuncio a los medios de comunicación, porque se puso en contacto con ellos el delegado del Gobierno español en la comunidad autónoma, Denis Itxaso.

El anuncio es por ahora una mera propuesta que se quiere trabajar con las comunidades autónomas y las autoridades locales. En el caso vasco, la nota de prensa se recibió con sorpresa porque el Gobierno de Urkullu no tenía conocimiento de estas proclamaciones, ni había postulado expresamente a ninguna localidad. Las mismas sensaciones trasladaron a este periódico fuentes de las alcaldías de Bilbao y Donostia.

En cuanto a la alcaldía de Bilbao liderada por Juan Mari Aburto, no supieron nada hasta que Itxaso les comunicó la propuesta antes de enviársela a la prensa. Bilbao no había hecho gestiones para postularse, sino que es una iniciativa del Gobierno español. Donostia confirmó también que el delegado había comunicado al alcalde Eneko Goia la propuesta a mediodía en una llamada telefónica pero que, antes de esa llamada, no habían tenido ningún indicio de que Donostia fuera a salir a la palestra ni se habían postulado en ese sentido. A nivel de partido, los socialistas, compañeros de filas de Sánchez, sí sacaron pecho de unas gestiones por su parte que habrían dado frutos.

Al menos en el momento inicial de realizar las propuestas, parece que la maquinaria del Gobierno español no ha estado del todo engrasada con las comunidades, que las formas no han sido participativas y que Moncloa ha primado el golpe de efecto ante los medios de comunicación, aunque tampoco se ha respondido con ninguna crítica desde los ayuntamientos ni las autoridades vascas. 

Segunda sorpresa

De hecho, al Gobierno vasco ya le tomó por sorpresa que el Ejecutivo español filtrara a la prensa que Euskadi albergaría la conferencia con autoridades autonómicas para preparar la presidencia europea, pero el Ejecutivo de Urkullu prometió colaboración pese a la sorpresa. Esa reunión de la Carue, la Conferencia para Asuntos Relacionados con la Unión Europea, tendrá lugar a finales de julio y acudirán los ministros de Política Territorial, Isabel Rodríguez, y Asuntos Exteriores, José Manuel Albares.

 

La presidencia europea es sobre todo un evento que interesa a Sánchez porque le da proyección mediática, pero nadie va a alzar la voz en contra o va a frenar las visitas de las autoridades europeas a sus localidades para cerrarse las puertas a una eventual repercusión de esa cumbre.

A pesar de que el Gobierno español ha trabajado este asunto por su cuenta, lo presenta como una apuesta por trasladar ante Europa la diversidad del Estado. En concreto, la lista la ha propuesto el Comité Organizador de la Presidencia Española de la Unión Europea, que está adscrito a la presidencia del Gobierno español y liderado por el ministro Albares. El Comité aprobó una lista de ciudades que el Gobierno español “propondrá” en coordinación con las comunidades autónomas y autoridades locales para que puedan cobijar las reuniones de la presidencia española. Es la quinta vez en la que el Estado asume la presidencia europea. 

El Gobierno español pone en valor que “la lista incluye ciudades de todas las comunidades”. “El Gobierno de España quiere así acercar Europa a toda la ciudadanía y hacer visible a Europa y al mundo la riqueza y diversidad de nuestro país”, dice la nota enviada a los medios de comunicación. Mientras permanece pendiente el debate sobre el modelo de Estado, el Gobierno de español ha redirigido la discusión hacia la descentralización de las sedes oficiales del Estado para situarlas en distintas localidades y no solo en Madrid, un gesto que no es más que cosmético a ojos de territorios como el catalán o el propio caso vasco.

Todas las ciudades

En la lista aparecen, además de Bilbao, Donostia e Iruñea, Albacete, Cádiz, Gijón, Las Palmas de Gran Canaria, Logroño, Murcia, Santander, Sevilla, Toledo, Valladolid, Zaragoza, Barcelona, Cáceres, Córdoba, Granada, León, Madrid, Palma de Mallorca, Santiago de Compostela, Tarragona, Valencia y Vigo. 

En cuanto a la conferencia preparatoria que tendrá lugar en Euskadi a finales de este mes, la Consejería de Autogobierno que dirige Olatz Garamendi aún desconoce los pormenores del orden del día, más allá de que se pretende preparar la presidencia de turno española.