Alivio de luto

Saques 1 de Xala.

Pelotazos Se cruzaron un total de 562 pelotazos a buena.

Tantos en juego 8 de Xala y 14 de Saralegi.

Errores 2 de Xala, 4 de Saralegi, 5 de Arruti y 2 de Apraiz.

Marcador 1-0,1-1, 1-2, 2-2, 5-2, 5-5, 8-5, 8-7, 9-7, 9-9, 9-13, 12-13, 12-17, 13-17, 14-19, 14-21, 17-21 y 17-22.

Botilleros Jokin Etxaniz aconsejó a Xala y Arruti, mientras que Roberto García Ariño hizo lo propio con Saralegi y Apraiz.

Incidencias El dinero salió 100 a 80 por Xala y Arruti. Unos 300 espectadores se dieron cita en el Beotibar.

bilbao. Postrada en el diván Asegarce, tratando de digerir su ausencia en la liguilla de semifinales después de quedarse a la intemperie en el Astelena de Eibar, Saralegi y Apraiz, los meritorios -sustitutos de los titulares Olaizola I y Patxi Ruiz- aliviaron al menos durante un ratito, una hora, el ánimo de la empresa bilbaina, que viste de luto. Afortunadamente no atropelló el estado depresivo de la promotora a Ekaitz Saralegi, alegre y pizpireto en el remate -se cobró 14 tantos en juego- una vez alejado de cualquier foco transcendental, y a Alexis Apraiz, que mostró pegada y más regularidad que en anteriores actuaciones en un duelo que les midió a Xala y Arruti, sustituto de Zubieta, a modo de inventario.

Con la honra como único aliciente, premio de consolación, el delantero de Amezketa enseñó los colmillos en posiciones rematadoras y mostró buena parte de su extenso catálogo de armamento ofensivo. Hizo bueno Ekaitz el trabajo del gernikarra en la trastienda, donde superó de punta a punta a Arruti, incapaz de reciclar el tonelaje del enfrentamiento una vez éste tomó velocidad de crucero y se acercó a la sala de las grandes discusiones. Se mantuvo en pie Arruti porque en el despertar fue el lekuindarra quien manejó los hilos del partido. Se mostró entonado nuevamente Xala, que no quiere perderle el hilo a la competición tendente como es a la distracción. El mandato de Xala se extendió a un par de palmos del meridiano.

Arruti, desgastado Sucedió que a Arruti, que se presentaba tras haber jugado el domingo, le fue goteando el tanque de combustible y no pudo con la aceleración de Saralegi y Apraiz, que rompieron la igualada a 9-9 para ponerse por delante por vez primera, 9-13, hasta romper el partido: 14-19. Fueron los mejores momentos del delantero guipuzcoano, catapultado por un Apraiz mandón en la zaga, confiado cada vez que atacaba la pelota. Aún así Xala se rearmó en los estertores del envite y dio algo de lustre a su final, aunque no le alcanzó para desfigurar el alivio de luto.