Ni bloqueos, ni fronteras, ni límites
Hemos sido puestos por nuestros padres y antepasados en un mundo de fronteras y dificultades que debemos afrontar si somos inteligentes y arriesgados, para llegar a unos objetivos legítimos que para nuestra humanidad son infinitos y están al alcance de los más esforzados en un mundo de atletas que no se conforman con ser del montón como borregos y retrasados, y que por eso viven, viajan, y descubren nuevos horizontes para sí y para sus descendientes cruzando límites y fronteras. Con nuestra cultura y herencia milenaria traspasaremos horizontes infinitos hasta llegar a un paraíso que les espera a todos los que se esfuerzan y luchar por mejorar sus vidas.