Aprovechando que estamos en plena época navideña, el banco presidido por Ana Patricia Botín ha querido tener un detalle con sus clientes: a partir del próximo 12 de febrero va a empezar a cobrar 36 euros anuales (ellos utilizan el eufemismo de 3 euros mensuales, que así queda más fino) por el uso de las tarjetas. Es intolerable que una entidad financiera que alardeó de tener unos beneficios de 5.966 millones en 2015 siga con esa política de querer cobrar absolutamente por todo (¿Cobrarán algún día por entrar en sus sucursales? Mejor no darles ideas, que las cogen al vuelo). ¿No hay nadie que pueda parar esa voracidad de ganar cada vez más, pero siempre a costa de sus sufridos clientes? El abajo firmante tiene con ellos el préstamo hipotecario, un plan de pensiones y tanto la nómina como los recibos domiciliados. He hablado con el director de mi sucursal; parece que todos estos requisitos no les son suficientes porque siguen en sus trece de cobrarme esa comisión. Legalmente no sé si será delito, pero lo que está claro es que la ética se la pasan por... el eufemísticamente denominado arco del triunfo.
- Multimedia
- Servicios
- Participación
