¡Ginés! ¿Qué pasa con esa bandera?, gritó el señor Villar cuando Juan Muñiz lucía la bandera de Asturias como celebración del título europeo sub'19 de fútbol. El presidente de la Federación Española nos ha dado una de sus facetas mas claras de su pensamiento fascistoide.

El villarato es algo más que creer que la selección española es la mejor del mundo y que el Madrid es el único representante de la unidad de la patria. También que eso de las autonomías es un coñazo, como lo dijo su jefe, el señor Aznar, a micrófono abierto, cuando ganó sus primeras elecciones.

Creemos conocer los ideales del presidente y cada cual es libre de opinar libremente de sus opciones políticas, sociales, religiosas e incluso deportivas, pero de eso a dictar unas normas que van en contra de los sentimientos de unos chavales amantes de su tierra va un abismo.

Total, que el seleccionador Ginés Meléndez arrebato al gijonés Juan Muñiz la bandera del Principado con mala cara, humillando a Asturias y a su identidad, aunque el chaval no quería ofender a nadie, y mucho menos a la unidad de las Españas.

Y es que lo de una, grande y libre, lo de una bandera, lo de Todo por la Patria sigue estando demasiado presente en los puestos de influencia en la sociedad.