AYER soñé con Margarita Robles en plan amazona a lomos de Pegasus, el caballo alado que planea sobre los móviles de los enemigos del Estado. ¡Qué tembladera! La ministra de Defensa defiende el derecho a meterle un troyano a todo disidente o amigo de disidente o pariente de disidente. En esa lógica, supongo que Mohamed VI habrá cambiado varias veces de teléfono tras decir la ministra hace un año que "con España no se juega" durante la crisis en Ceuta. Lo mismo las recientes genuflexiones ante el alauita en el Sáhara son para que no sospeche que le han colado el virus. ¡Qué linces! Y nosotros criticando...