E ha convertido en una constante asimilar y proyectar que un año de pandemia produce un cansancio social que hay que comprender. Y es así. Pero ocurre que también hay un punto de profecía autocumplida que se alimenta de ese estado de ánimo. Los medios tenemos la obligación de informar y presentar la realidad en sus términos. Sin embargo, hay términos de esa realidad que alimentan titulares que redundan en reforzar esa percepción. No estamos aquí para ocultar la crudeza de los hechos. Ni tampoco para alimentar estados de ánimo que no ofrecen soluciones ni consuelo. Aunque venda.