BORJA Sémper es un tipo inteligente, abierto, moderado, moderno. Un verso suelto que no encaja en el modelo del PP, menos ahora. Aun así, aspira a ser alcalde popular de Donostia. Dice que no quiere que “un personaje como Otegi” influya en la política, ni española ni vasca, pero afirma que “si Bildu, Podemos o Vox me plantean la teoría de la relatividad, tendré que estar de acuerdo”. Bueno, eso es relativo (con perdón). O sea, no descarta “acuerdos razonables” (!!) con Bildu pero rechaza que otros lo hagan. Eso no es relatividad, es relativismo.