Viajar sobre las aguas del mundo es uno de los deseos de muchas personas. Para ello, los gigantes del mar, es decir, los cruceros, son el transporte, o mejor dicho “la gran ciudad” para disfrutar de un viaje al aire libre, inigualable, con paradas por diferentes ciudades del mundo, según los destinos elegidos, claro, y espectaculares vistas al ‘Mare Nostrum’. En España, los más demandados surcan el mar Mediterráneo atracando en Nápoles, Roma, Palermo, Marsella, y además de Italia, también hacen escala en las Islas Griegas, entre otros lugares.

A finales de los años 60 y comienzos de los 70 del siglo pasado, ya había más de 100 cruceros en el mundo (hoy en día hay unos 30.000 registrados, que ofrecen más de 2.000 destinos). Así se dio comienzo al negocio marítimo y turístico de estos grandes buques, y a diferencia de los hoteles convencionales, este además de ser una gran ciudad flotante, también destaca por su ámbito terrestre, haciendo paradas durante varios días en ciudades del mundo, haciendo paradas en sus puertos durante dos o tres días. Tal es su demanda y atractivo que, en la actualidad, los cruceros están considerados como una de las fuentes de turismo más emergentes.

Estas grandes navieras ofrecen entretenimiento y diversión, siempre dando un exquisito servicio y de calidad a todos sus clientes. Se dirigen a todo tipo de públicos, desde familias, parejas, grupos de amigos... aunque con el paso de los años la tasa de edad de los visitantes se sitúa a partir de los 45 años. En su interior pueden albergar hasta 7.000 pasajeros, depende del tamaño del barco. El estándar cuenta con 300 metros de largo, como tres campos de fútbol, 28 pisos y 73 metros de alto, toda una gran ciudad a la que no le falta detalle: gimnasio, cafetería, tiendas, cajeros... Si estás pensando ir a borde de este medio de transporte este verano, te contamos sus múltiples beneficios.

Las ventajas de un crucero

  1. Comodidad: a diferencia de los destinos o viajes habituales, los cruceros aportan un confort extra a sus tripulantes. Además de unas excelentes habitaciones con todo tipo de detalle, cuentan también con servicios, sin salir del buque, y sin tener que deshacer las maletas. Igualmente, a veces no es necesario ni tan siquiera salir de él puesto que también tiene miles de actividades programadas para todo tipo de edades, piscinas, casino, juegos, zonas para tomar el sol, golf, clases de bailes e incluso espectáculos, que harán que tus vacaciones sean perfectas. Con todo esto querrás repetir y se lo recomendarás a todos tus familiares y amigos.
  2. Visitas múltiples destinos: sin tener que coger muchos vuelos u otro tipo de transportes que hacen que tus días sean agotadores y pierdas tiempo, llegando a tener que madrugar, lo cierto es que los cruceros cuentan con una ruta establecida y hacen escalas en aquellos lugares que los visitantes han elegido. Por ejemplo, Italia, las Islas Griegas, Turquía, Norte de Europa, Oriente Medio, las Bahamas, o para aquellos aventureros que cojan un transatlántico puede incluso dar la vuelta al mundo. ¿Quién se atreve? Normalmente suelen hacer paradas de dos o tres días, para contemplar la belleza de los lugares y que los que van a bordo del crucero puedan cambiar de aires y disfrutar de urbes diferentes.
  3. Conocer gente de todo el mundo: durante el viaje también harás nuevas amistades. En las actividades o en diferentes puntos del crucero, te encontrarás con personas de diversas partes del mundo. Asimismo, normalmente todos los tripulantes hablan el mismo idioma para facilitar la comunicación entre todos, por lo que se estrecharán lazos durante la estancia. Además de ser una gran ciudad flotante, los cruceros son un gran espacio para relacionarse. Después, una vez intercambiados los números de teléfono y haber vivido miles de experiencias sobre los mares del mundo, será la excusa perfecta para visitarlos y hacer un nuevo viaje.
  4. Precios económicos: por el mismo precio que un viaje tradicional se puede viajar en un crucero con todas las ventajas que hemos mencionado. Las comidas, alojamiento, transportes, actividades. Todas estas cuestiones están incluidas ya en el precio, por lo que antes de empezar el viaje todo esto estará garantizado. Sólo tendréis que preocuparos de disfrutar y vivir una experiencia inolvidable.