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El destierro del Retuerto

Debido a las actuales obras de Ibarreta, el equipo barakaldarra recibe esta tarde como local en Serralta a la Cultural de Durango

El destierro del RetuertoFoto: borja guerrero

bilbao

pUEDE que el Retuerto solo se pierda una jornada liguera de Tercera sin jugar en casa o, si la diosa de la climatología se enfada, puede que sean dos, en las que el equipo de Peli falte a su cita habitual de la matinal de los domingos de Ibarreta. Lo que sí es verdad es que este cambio de moqueta está condicionando las costumbres en los entrenamientos de casi 250 jugadores, repartidos en 15 equipos, que son los que conforman este humilde club de barrio. "¿Incómodos? Es lo que hay. Los equipos están repartidos por tres campos. El equipo mayor en Serralta y también ha estado entrenando en el campo del Dínamo de San Juan. Los demás, los juveniles y cadetes, entrenan en Lezama, los infantiles en Ansio y el viernes, dos cadetes y juvenil B, lo hacen en la Arboleda", enumera Roberto Rodríguez, en su cuarto año como director deportivo del Retuerto. Todo un verdadero sudoku es planificar los entrenamientos de todos los equipos rojiblancos en estos dos meses de diciembre y enero. Así como su abastecimiento de material. "Entre entrenadores y directivos trasladamos en nuestros coches, balones, chinos, petos?. Los padres desplazándose con los chavales. También hemos aprovechado para dar descanso al deporte escolar que descansaba en Liga. Aunque este fin de semana y el próximo jugarán algún amistoso en el polideportivo de Lasesarre" explica Rodríguez.

Su equipo referencia, el de Tercera, se mide esta tarde al Durango, y lo hará de prestado, en Serralta, a las 18.15 horas. "Hemos buscado un campo que se parezca lo más posible al nuestro por dimensiones. Es un poco más pequeño, pero es lo que más se asemeja a Ibarreta. Luego, con la nueva hierba, creemos que algo nos influirá. Aunque, como el campo no es muy grande, no creo que sea para tanto. Los equipos contrarios, que manejen más el balón, sí que lo notarán ya que con el otro terreno cambiaban su estilo. Se podrá jugar el balón más por debajo, algo que no se podía hasta ahora, que a veces no rodaba ni el balón, no paraba de botar", relata Roberto.

La Federación vizcaina, propietaria del campo, ha estimado que la duración de las obras será de tres semanas si acompaña el tiempo; si no pueden convertirse en cuatro o cinco. Así que ya que, tras la jornada de hoy, el Retuerto jugará en Azpeitia y Gobela; y puede que sea el Basconia el que estrene el nuevo tapiz. Si no, habría que esperar al Elgoibar, para que fuera el rival que pisara, quince días después, sobre el nuevo verde. "Tenemos que depender de los horarios que nos dejen en los campos que estamos de prestado y hay ganas de jugar en el nuevo Ibarreta", comenta Roberto, entre risas, esperanzado. Hay que tener en cuenta que el Retuerto es el único equipo de Barakaldo que se costea los gastos de la instalación. Disponen del campo pero el club asume los gastos de su uso: luz, agua...

Por otro lado, en lo futbolístico, el club que preside Ángel María Pascual, que ha retornado a la Tercera División cuatro años después, tras dos ascensos consecutivos, es colista del grupo ,pero en Retuerto no se habla de fracaso. "El trabajo del cuerpo técnico del primer equipo ha sido y es muy bueno. Llevan tres años y ascendieron de Preferente a División de Honor y de Honor a Tercera. Intentando mantener a la mayoría de la plantilla y fichando jugadores de Honor. No podemos pagar mucho. Lo que ofrecemos, lo pagamos. No es mucho pero aseguramos el pago. Con gente joven y con ganas de mejorar y aspirar a subir de categoría como hicimos. Pero sobre todo, con chavales jóvenes y con ilusión. Así que fracaso, ninguno. Sabíamos que al subir a Tercera íbamos a luchar por mantener la categoría. Eso está claro. Pero somos un equipo humilde, de barrio, y para nosotros es un éxito jugar en esta categoría. Aún sabiendo lo que conlleva, más gastos? vamos a luchar hasta el final. ¿Que no se puede? Pues no pasa nada. Tampoco es una meta primordial, aunque siempre es bonito jugar arriba y más en el nuevo Ibarreta", finaliza Roberto Rodríguez.